La caja negra del comisariato
CIUDAD DEL ESTE (investigación especial) Lo llamamos asì, pero no tiene nada de especial, es lo màs normal hoy en dìa lo que ocurre en el Alto Paraná, principalmente en CDE y sus comisarías, donde existe un aporte extorsivo de delincuentes, pirateros, contrabandistas, estafadores, motochorros, prostíbulos clandestinos, garitos clandestinos, en fin, cualquier cosa irregular que atente contra las leyes. La famosa caja negra de los comisariatos, porque es dirigida a tal comisaría y tal comisario, que esté de turno, ya sea comisaría primera, segunda, tercera, cuarta, quinta, sexta, séptima, y las subcomisarías de ciudades aledañas de la capital del Alto Paraná. Ah, no nos olvidemos departamento de Investigaciones, GEO, Automotores, Antimafia, Interpol, Antinarcòticos, Senad, todos en estos lugares, los comisarios cuando vienen de la capital para ocupar el cargo, lo primero que recibe es de su subalterno más antiguo las coordenadas, quiénes son y cuánto tienen que rendir semanalmente. A esto se suma una lista de algunos trabajadores de la prensa, algunos con diplomas, otros sin, algunos con credenciales truchos o coches de rara procedencia con enorme logotipo de prensa, que los fines de semana desfilan por esos lugares para recaudar alguito que sobra de las cajas de los comisariatos.
Esta nomenclatura hace que los ciudadanos de bien tengan que estar en manos de delincuentes de todo tipo, donde cada día se escucha y se ve por los canales televisivos, por los matutinos de motochorro asalta a una joven, la mata simplemente la mata por un celular. Para los delincuentes esto es caldo de cultivo, ya que ellos semanalmente tienen que pasar un canon en los comisariatos para el comisario de turno y algunos ta yra. Otra cosa que también los deja a gusto a los bandoleros es la guardia policial privada, que también muchas veces los boqueros, son los propios guardias policías apostados en financieras, casas de cambio y lugares donde hay mucho circulante y una vez consumado el hecho, ellos reciben un 10 a 20 por ciento de lo sustraído. Bonito, no? Claro, porque ser tan drástico, también hay policías buenos, honestos, que llevan en el alma al uniforme y siempre tengan el espíritu de defender al ciudadano en materia de seguridad y afines. Pero como dice hay de todo un poco en esta viña del señor. Amen chubi!