CIUDAD DEL ESTE (vialidad, por Esteban Roa) Como siempre Paraguay crea nuevas ideas pero siempre sin proyección real, constante y sonante, donde pueda ser utilizado como medio de tratar de contrarrestar los accidentes de tránsito y las malas costumbres de los conductores de vehículos pesados, medianos, motocicletas, etc ocurridos en este país por las innumerables causas, como el alcohol, el conductor sin registro y si tiene está vencido; para los motociclistas, las multas tendrían que prevalecer por no usar casco, conducir en zapatilla, no tener espejo retrovisor, no usar chaleco reflectivo, no encender las luces, no llevar menores de 12 años, no transportar más de un acompañante, no transportar pasajero en motocargas, entre otras falencias que luego causan los percances ruteros.

Esto se tendría que cumplir al pie de la letra, sin embargo, hoy son muchos los denominados “motoqueiros” que no están cumpliendo pero que no son controlados por las autoridades, ya sea patrulla caminera y la policía de tránsito, que en vez de cobrar multa, solamente cobran una coima y luego el infractor sigue viaje tranquilamente, cuando lo correcto hubiera sido sacarle la moto sin más trámites y despojarlo del registro, como se hace en otros países. Y así de esta manera tratar de enviarlo a la coricancha (el patio de Dios) para descansar en paz y dejar a los pobres inocentes también fuera de este camino. Y ya que hicieron una nueva ley, lo cuestionable es que sólo figuran las multas para automóviles, pero no para los motociclistas, que son los principales infractores y que mueren en las rutas del país. Entonces no basta ni sirve este operativo de nuevas multas, si los motoqueiros nuevamente quedan excluidos.