“SI NOSOTROS NOS VAMOS, USTEDES TAMBIÉN CAERÁN”, DIJO UN MINISTRO
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Hace unos años, se viene mencionando con mucho énfasis sobre la necesidad de cambiar a los miembros de la Corte Suprema de Justicia, porque son éstos los causales que en nuestro país la corrupción sea un hábito ejercido por los integrantes del Poder Judicial y los demás poderes, lo cual hace que cuando se quiere sanear o pedir un juicio político, en el caso a Sindulfo Blanco, por las irregularidades cometidas, prevaricato, venta de sentencias, tráfico de influencias, entre otros, como también Torres Kirmser, que tiene a toda la parentela en el Poder Judicial, en fin, todos estos jueces que están hace tantos años ya no los pueden sacar, porque saben todos los delitos cometidos por los politiqueros que están habitando en el Congreso. Entonces cuando se inicia gestión para el juicio político, evidentemente los ministros de la Corte envían una contrapropuesta a los legisladores, si me quieren enjuiciar, yayoleéte o sea, contaremos todos los robos, saqueos, despilfarros, malversaciones, negociados, licitaciones amañadas y otras cosas más que si continúa el juicio “yo pondré en tabla” y veremos a quién la ciudadanía lo incrimina. Si nos toca a nosotros y ustedes, vamos todos al infierno, pero nosotros ministros no iremos solos. Y es la realidad lo que dice este miembro del Jurado de Enjuiciamiento, quien nos pidió su versión pero nos pidió que guardemos su identidad, para no ser destornillado del cargo.
Un claro ejemplo es de aquellos delincuentes homicidas que mataron por robar un celular al transeúnte, son liberados o con prisión domiciliaria y después de un mes nuevamente se ve en las páginas o pantallas chicas que ese individuo volvió a matar, dejando una familia en condolencia por una mala actuación de jueces y fiscales chicaneros que tienen la cobertura de un presidente de la Nación, como fueron Andres Rodríguez, Juan Carlos Wasmosy, Raúl Cubas Grau, González Macchi, Nicanor Duarte Frutos, Fernando Lugo, Frauderico Franco y el más cuestionado de todos, que tiene ilustrada en sus páginas un grueso y largo prontuario, dijo este señor que por Dios pidió que no se mencione su nombre, porque da gusto trabajar en el JEM porque ahí hacemos lo que queremos y jueces y fiscales nos rinden pleitesía. Yo sé que también soy cómplice de ellos y si hubiere en Paraguay la figura del arrepentido, yo me iría a declarar en vox populi, así como lo hizo Leonardo Fariña, el ex modelí de Lázaro Báez de la familia Kirchner.