Los dimes y diretes de algunos kuña´i con pantalones

POR SER RECHAZADOS DENIGRAN A LAS FÉMINAS

CIUDAD DEL ESTE (tendencias, por Carlos Roa) La cronología de la vida. El mundo a cada día trae más una sorpresa, pero que se refiere a humanidad, costumbre, tradiciones, normas y tabúes. En las antípodas en un grupo de jóvenes compañeros ya sea de escuela, colegio o universidades siempre lo tachaban de kuña´i aquel hombre que hablaba mal de las mujeres diciendo que es una PE, una PA o una PU, en fin, regalías verbales que ofrecían aquellos pendejos que no tenían vocación, actitud y determinación para hacer un levante, entonces se pasaban hablando mal o del propio amigo o de las mujeres que no les daban bolilla. Mientras tanto las mujeres fueron creciendo y creciendo, antes había una mujer para 10 hombres, hoy hay diez mujeres para cada hombre.

Y muchos dirán dónde están, principalmente aquellos que tienen entre 40 y 60, que yo no los veo, dicen. Y si les ven, ya solamente las ganas le acuden, que según fuente ni con un guincho pueden levantar al amigo y mucho más todavía si este es más feo que un kururu con corbata, porque las mujeres actuales son beldades de féminas y cada día son más exigentes y le tachan de kuña´i, de puto, mujerín, maricón y otros epítetos a aquellos tipos que se pasan en rondas de terere a vilipendiar a las mujeres.

Esto es costumbre en Paraguay, principalmente aquellos holgazanes que no trabajan, viven bajo la pollera de su mamá pero ya son mayores, y su madre le hace propaganda por los vecinos. Ay ña fulana, ni te cuento mi hijo es tan guapo y tan honesto ai ai ai, ojalá encuentre una buena pareja, que trabaje, sea responsable y sea fiel. Con todas esas cualidades que tiene su hijo creemos que lo único que podrá conseguir es una María Magdalena en tiempos de Jesús.

Los conservadores creen y suscriben que las mujeres hay que tratarlas como se le trata a una flor, con delicadez, esmero y atención porque en realidad los verdaderos hombres no podemos vivir sin ellas, somos semillas de esta humanidad y ellas las huertas donde plantamos y ellas cuidan hasta que crezcan. Por ese motivo deberíamos hacer un mea culpa de todos aquellos que propinan golpizas a sus parejas o aquellos másculos que ven su vecino soqueando a su concu sin hacer nada. Es hora que le demos los derechos por derecho a las mujeres, son seres humanos como todos. La diferencia que los hombres tienen larguito y las mujeres cortita y con huequito. Que sabrosón!

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