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FISCALA EN EL OJO DE LA TORMENTA
Realmente si esto no es antinomia qué es entonces? Porqué los ciudadanos paraguayos tenemos que aceptar este tipo de arbitariedades cometidas por algunas autoridades, comenzando por el presidente de la República hasta el volái tambo verá que lleva los víveres en la casa de su jefe, ya sea militar o policial. En fin, son costumbres y tradiciones de este Paraguay tan hermoso, que ha sido convertido en un parque de diversiones para muchos politiqueros sin – vergüenzas. Cuando uno trata de buscar y subsanar las sin – verguenzías y saqueos del Estado, estos defienden a los protagonistas de la corrupión, que son gobernadores e intendentes, que se pasan morfando la plata para la educación como el FONACIDE, en este caso hablamos de este imprestable mayordomo de Lambaré, Roberto Cárdenas, que hizo de todo pero hoy día se pasea orondamente por calle Palma disfrutando las empanadas de Dolly Bar, mientras la fiscala Blanca Agüero, que tuvo el coraje de enfrentarlo la quieren condenar por actuar de forma decente y honesta. Que país es este?
Y de yapa, un grupo de cuervos con el rótulo de Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados, que son Adrián Salas, Enrique Riera, Raúl Torres Kirmser, Gladys Bareiro, Jorge Avalos Mariño, Oscar González Daher, Adolfo Ferreiro y Oscar Tuma, le iniciaron un proceso por supuesto mal desempeño en otra causa, pero sin embargo con el objetivo de coartarla, porque en este país los corruptos son intocables, porque si fuese el caso, estaríamos en una revolución, arrancando el pellejo desde el presidente hasta los funcionarios, que solo se dedican a atropellar a los ciudadanos que trabajan decente y honestamente.