CIUDAD DEL ESTE (Deportes, por Carlos Roa) Hoy viajando por el túnel del tiempo, voy a 20 años atrás. Es como si fuese ayer, que el estadio del 3 de Febrero salía de ese dibujo de canchita de barrio, donde era manejado por Antonio Pelé Aranda, y que se protagonizó uno de los eventos deportivos más importantes de Sudamérica, conocido como la Copa America 1999. En aquel entonces era conocido como el estadio Tte. Cnel. Antonio Oddone Sarubbi, donde desfilaron las grandes estrellas del fútbol, como Palermo, Ronaldo, Ronaldinho, Zanetti, Francescoli, y figuras trascendentales del deporte, como Wanderley Luxemburgo, Tino Marcos, comentarista, Galvao Bueno, grandes referente de la Red Globo, el alemán Beckenbauer, como así también grandes figuras paraguayas, como Edgardo Villalba Viccini, Arturo Rubin, J.J. Bernabé, Flaviano Díaz, y otros, que fueron baluartes de esta historia. Como el encargado de las tomas fotográficas del estadio en construcción hasta el día de la inauguración de la Copa América.
Un conocido reportero periodista, Carliños Roa, Gustavo Nuñez, Miguel Avalos, Oscar Florentín, y otros conocidos en el ámbito del rubro del cuarto poder. Historias que nunca dejarán de revolotear en la mente de todos los que participamos en ese evento deportivo tan prestigiado hasta hoy día. Donde vimos a un reportero japonés en pleno estadio con una cajita de metal y que fumaba un cigarrillo y de vez en cuando abría la cajita y echaba la ceniza en su cajita que tenía como cenicero para no ensuciar el estadio. Así como vimos a Ronaldinho dentinho convertir su primer gol contra Venezuela en el arco sur. También recordemos que el tiempo no estuvo de nuestro lado por el Este, donde recuerdo balbucear palabras de rabia por el director técnico de Brasil, Wanderlei Luxemburgo, que se enfadó por el barro que había y balbuceó estas palabras “po meu, o meu zapato custa 350 dólares porque es un escarpin” (zapato italiano).
Y cabe recordar, y cómo olvidarlo que en 1999 fue nuestra primera Copa América realizada en Paraguay. Só pena que nao conseguimos chegar neim no terceiro lugar. Mais como diz meu colega Tomas eu apenas sabia clicar. Eu nao sabia nem ler nem escrever, mas tudo tem seu tempo, mas um dia vou chegar lá.