CIUDAD DEL ESTE (Realidad Fatídica, por Carlos Roa) Ni sé cómo comenzar esta narrativa, según se sabe desde 1900 y antiguamente que la Itaipú es una empresa binacional y que tienen dividido miti miti con el Brasil, o sea 50% para cada lado, sin embargo, en los quehaceres la Itaipú lado Brasilero invierte en el progreso, en la ciudadanía para un confort mejor de hospitales, aeropuertos, ciudades, en fin. En esta pandemia ellos otorgaron ayudas por doquier, en Paraguay la cosa es totalmente diferente, la Itaipú da súper sueldo a hurreros, esposas de diputados, aseso-retes, canje de politiqueros y en hospitales en un tiempo crítico no se escuchó ni se leyó mucho menos se vio que hicieron adquisición de camas, insumos, pero si hay una cosa que son igualitarios, dicen que hay un pacto de que prohíbe que los ciudadanos tanto del Brasil como de Paraguay no puedan ingresar y pregunta qué se está haciendo con la plata del Estado.
Itaipú lado brasileño duplica ruta BR-469, financia nuevo Puente Paraguay-Brasil; Amplia Aeropuerto de Foz, y aportó a los municipios de Paraná en 18 meses U$D.181.000.000 dólares según Director lado del Brasileño. Aquí en Paraguay, Hernandarias 70% caminos de tierras y empedrados, en Foz de Iguazu en su totalidad están con capa asfáltica, en el Brasil director un Ingeniero, en Paraguay un Economista, contador de historia; en Brasil los funcionarios a ocupar cargos en esta empresa hidroeléctrica hacen cursos y capacitación para tener un puesto de trabajo, en Paraguay tenés que salir a gritar “¡¡hip hip HURRA!!” y para ser funcionario de la empresa no hace falta ningún tipo de capacitación ni experiencia, solo se necesita ser del partido colorado, practicar politiquería, pasearse con pañoletas rojas o azules y ya está. Sueldo base 60 millones, dinero que se tendría que usar en el progreso del país, de las ciudades, de los departamentos y de los propios ciudadanos, y es ahí donde comenzamos a fallar porque nunca hacemos nada los comunes o los farrapos deshilachados, para qué irnos lejos, Yacyreta, Cartes y Macri, una historia de acuerdos y negociados en una cajita de pandora.