CIUDAD DEL ESTE (corrupción y coimas, por Carlos Roa) Todas aquellas pautas periodísticas que se publicaron en este medio que supuestamente eran falacias dichas por el propio director fariseo Julio Fernández Frutos, donde querelló al director periodista de este medio y pidió a la jueza de la causa para que se me examine por un profesional psiquiatra, porque todo lo que publicó este medio sobre corrupción y coimas, sobre las estaciones aduaneras del país eran locuras. Además agregó a su testifical a 14 testigos y lo simpático es que la mayoría de estos son gente que este medio publicó como complices de la corrupción y coima, que son los administradores tanto de Silvio Pettirossi, Guaraní, Global, Campestre, Aduana del Este y otros eran los supuestos testigos ndaje. Y en una conversación face to face (cara a cara) en los tribunales con el fariseo evangélico, él murmuró y dijo “con lo que vos publicás, desprestigiás mi honor”. Y mirando y haciendo un mea culpa, yo no encontré ese epíteto, y después de unos días en medios capitalinos y de Alto Paraná vimos que su esposa se tragó la plata de la merienda escolar, o sea, en un dicho grotesco prometió faisanes al horno, mientras que la realidad eran cuervos al spiedo.
Y cómo este señor se atreve a hablar de honorabilidad, es decir que está hace tiempo en algún negociado, por muchas razones, cómo puede ser que en una institución del estado haya intrusos usando el sistema Sofia (Paraguay) nexo sistema Sara (Brasil) para hacer los arreglos de las mercaderías que ingresan, si un libanés o un chino hace ingresar un container por la aduana de CDE de un millón y medio de dólares en electrónicos estos tienen que tributar unos 125 mil dólares, sin embargo con las secretarias o secretarios máu e intrusos usurpadores de cargos esto se reduce simplemente a unos 15 mil dólares, y es allí donde el estado queda lisiado de lo que le corresponde de tributación mientras secretarios y secretarias andan de Audi o presentan sus encantos para conseguir ingresar como funcionaria en una estación aduanera del km. 12 y es experta en manipular el sistema Sofía y el vicedirector de Aduanas Roberto Quiñonez, quien según murmuran algunos funcionarios del otro bando dicen que es “un tipazo” ndaje, “auch”, le firmó la contratación mientras el presidente de la república bananera sacó una resolución que no podía contratar a funcionarios en tiempo de pandemia y mucho menos sin concurso. En fin, esta institución llamada Aduanas del Paraguay es la peor mierda que existe en el país. Hay puterío, corrupción, coimas, usan oficinas como bulín, de muchas de las secretarias que deambulan por la institución en CDE encargadas de tramitar los papeles diligenciales para las salidas de contrabando y esporádicamente los legales.
Y cómo llegó a este punto, porque el presidente de los payasos la semilla de la dictadura dio carta libre a estos funcionarios de aduana, de su grupo de la secta de los 50 del patíbulo conocido como centro familiar de adoración, que tienen un pavor y rabia contra los propios compatriotas humanos católicos, y que según fuentes dicen que lleva el diezmo de las aduanas y que convirtió a esta institución en una batalla del Opus Dei. Y que explicación me da Julio Fernández Frutos si todo esto y más ocurre y nunca hizo nada, nada, nada, habla de querellar, trata de amedrentar enviando vehículos sin chapa y me interceptan individuos con cara de nada bueno, amenazando y diciendo dejá de publicar o te hacemos la boleta. Yo creo que los honorables se presentan face to face y no enviando a sicarios.