CIUDAD DEL ESTE (Nacionales, por Redacción) en qué momento fue que alentarle a tal o cual persona se volvió una situación denigrante y mal vista en nuestra sociedad? En el momento en que las personas dejaron de alentar y apoyar por sus creencias, y pasaron a ser unos hipócritas, doble cara, que buscan sólo el beneficio propio, un cargo en una institución pública, o el sueldo sin cumplir realmente el cargo, lo que en Paraguay se conoce como “planillero”, cegados por el fanatismo solo saben repetir el nombre de su ídolo y no toleran que los demás opinen distinto, hoy vamos a hablar de los HURREROS, en el mal sentido de la palabra, o lo que los paraguayos entienden como hurrero de forma generalizada.
En Paraguay ser hurrero es igual a ser chupa media, también conocidos como zoqueteros o planilleros, estos no precisamente están relacionados con un partido político, puede ser de cualquiera, liberal, encuentrista, colorado etc, es una persona que apoya a un candidato sin importar si es un bandido, un corrupto, un ladrón, el hurrero siempre le defiende a muerte a su “kavaju”. La situación que se presenta ahora es que antes el hurrero solo opinaba en su seccional o en el círculo íntimo de su partido, pero ahora lo hacen a través de las redes sociales y están ahí pendiente de cualquiera que opine en contra de su candidato y saltan a defenderle a capa y espada, porque para el hurrero su candidato es lo máximo y cuando sale alguna noticia que demuestre que el candidato cometió un delito el hurrero no ve, no sabe nada, se hace del ñembotavy, esas son las cualidades del hurrero, ser fanático extremo y ñembotavy.
Tergiversan todo lo que el candidato hace mal, justificando los delitos del candidato y si alguien opina diferente les insulta o le ataca por su lado personal que nada tiene que ver con el candidato, por ejemplo, a un hombre con una foto de perfil donde se le ve arreglado le quiere callar diciéndole “vos no sabes nada vos sos puto” aludiendo a su sexualidad, o una persona que opina y tiene un cargo público como docente o enfermera, que en realidad no ejerce la política “vos sos planillero” y por supuesto hurrero del partido contrario. En Fin, una seria muestra de lo rídiculo que uno puede ser gracias al fanatismo.