Somos muchas personas a las que nos gusta tener plantas dentro de nuestra casa o jardín, por lo general solo buscamos que sean plantas que se vean bien y que sean bonitas, pero desgraciadamente, muy pocas veces estamos conscientes sobre lo peligrosas que pueden ser.
Todo comenzó cuando el pequeño Esteban de 5 años de edad jugaba, cuando le avisó a su mamá que se sentía mal y ella pensó que solo era una indigestión o cansancio. Comenzó a preocuparse al notar que su hijo empezaba a tener un color extraño en la piel y dificultad para respirar.
Inmediatamente llamó a la ambulancia, la cual lo trasladó al hospital donde fue internado de emergencia por una posible intoxicación, no sabían lo que pasaba, fueron momentos de mucha angustia.
Media hora después, el doctor salió del lugar donde estaba el pequeño para informarle a su madre que había fallecido y que la posible causa había sido envenenamiento por algo que había comido. Ella estaba desconsertada, no tenia idea de que pudo haber comido.
Por tal razón, solicitó un análisis sanguíneo y los resultados revelaron una fuerte dosis de un químico llamado Oxalato de Calcio.
Este químico se encuentra en una planta llamada Dieffenbachia o mejor conocido en países de latinoamerica como Amoena, la cual es muy común tenerlas en nuestra cosa. Mucha gente las tiene en interiores puesto que tiene gran resistencia a estar en la sombra sin necesidad de la luz del sol, ya sea en casa o en oficinas, pero lo cierto es que se debe ser especialmente cuidadoso más que nada con los pequeños por su alto indice de envenenamiento si es que se llega a ingerir.