Derroche en medios en vez
de invertir en gastos sociales
El otro día justamente cuando se celebraba el día del periodista, con un discurso fayuto, el presidente HC salió a felicitar a todos los comunicadores del país, escribas, perifoneros, locutores, presentadores de programas, en fin, esa gama que envuelve el rubro del cuarto poder en nuestro país. Incluso hubo un aluvión entre los periodistas ponderando que el presidente muy temprano los recordó y que sería una intención de regularizar el convivio con el jefe de Estado y los periodistas del país.
De un amanecer subliminal se convirtió como si fuese aquel domingo 7 de diciembre de 1941, cuando en Pearl Harbor los japoneses bajo comando del almirante jefe de la Flota Combinada, Isoroku Yamamoto, bombardearon la base naval de los americanos. Esta vez no fueron los nipones, sino la prestanombre del presidente, o sea su hermana Sarah Cartes, enviando un sutil torpedo a su propio medio, con este mensaje prohibido hablar mal de los pa´i y mucho menos investigarlos.
Esto abrió una caja de Pandora de comentarios de los que están en el SPP, lectores y muchas personas más que conocen desde antaño que la religión siempre fue el protagonismo de casos terroríficos, violación, pedofilia, homosexualidad, sadomasoquismo, sodomia, y cuando alguna vez una pueblerina quiso ser devota a Jesús, ésta tenía que demostrar con su virginidad, poniendo al servicio del clérigo, que comandaba el capitolio de la religión en la era medieval y hasta en la era actual. Siempre aquellos que tienen pecados por doquier son los que buscan defender a sus propios malhechores, colación a ésta trifulca ocurrida en el día del periodista se comentó por todo el país cuánto gastaría ADN para salir en las calles y ser distribuido gratuitamente con una textografía y una línea editorial totalmente inverosímil que en muchos lado dicen ni gratis ndaigusto ya leé koa. Se comentó también que justo allí hay un director Benjamín Livieres, hermano del finado Rogelio Livieres Plano, un sacerdote que fue sin – vergüenza y caradura, además de protector de pedófilos como el padre Urrutigoity, que vivió bajo una sotana perversa malversando recursos destinados a la clase más necesitada, yendo a los lugares para matar las ganas y lujurias, apostando en casinos, ya sea de Paraguay o Uruguay, donde quedó todo ese dinero que fue dado por Itaipu para mejoras en los barrios de CDE, donde hay pobreza y necesidades.
Hay muchas preguntas a este medio, realmente el dinero vino de la tabacalera o de las falquitreras de HC, porqué no puso a nombre de su hermana, que es dueña del conglomerado de medios o algún pariente cercano. Pero raróficamente este puso como dueño a un letradito de nombre Julio Paredes y que según fuentes fidedignas, gastan 200 millones mensualmente para las publicaciones, movimientos administrativos, como papel, tinta, salarios, combustible y otros, simplemente por egolatría o le va servir como portavoz en el futuro para que éstos puedan tratar de defender lo indefendible o mancillar las mentiras con medias verdades? El autor principal de esta novela es el encargado de TABESA, José Ortiz, quien habría realizado el negociado con el ex propietario, Héctor Guerin alias Aguara´i, que fue cesado en el cargo de director de Vanguardia y luego por arte de magia se convirtió en el señor ADN, algo medio raro con inversiones millonarias de un Walid. Toda una historieta para defender la mentira. Si realmente el presidente tuviese un poco de consideración, esos 200 millones serían mejor gastados en alimentos para aquellos ciudadanos plebeyos del país. Pero es bien sabido que cuando HC estaba en el colegio Internacional, tuvo una riña con un compañero porque el otro defendía a los pobres y éste dijo tener odio a los pobres, según dijo su ex compañera Sarita, la chiquitita.