 Medico Lino Villar Cataldo |
SE HUMANIZAN MAS CON LOS BANDIDOS QUE CON LAS VICTIMAS
Un relato mirabolante ocurrente en la sociedad paraguaya donde hoy todos estamos pagando el error o la mala praxis o simplemente el formato estrafalario que le dieron al nuevo código procesal penal en nuestro país, ya que el delincuente es más favorecido con esta legislación. Mientras tanto la víctima siempre tiene que llevar la peor parte. El otro día causó furor un hecho ocurrido en Argentina, en una entradera (invasión domiciliaria para robar) donde un médico paraguayo en defensa propia mató al delincuente, con muchas entradas en la cárcel y que hoy vive en penurias, por las amenazas de parientes de este bandido que quieren ajusticiarlo.
En nuestro país ya no se sabe más si están a favor o en contra de los delincuentes. Primero porque no hay casos resaltantes en los cuales los autores fueron condenados con pena máxima. Generalmente le dan prisión domiciliaria a asaltantes, que vuelven a reincidir y luego dejan una familia en luto, porque matan para robar, sin importar un carajo la vida del semejante. Y lo peor de todo que entra a tallar los supuestos DDHH ya que la víctima también era humana y el delincuente lo mató, pero cuando se va hacer justicia con el bandido, las comisiones de DDHH salen a hacer berrinche tratando de justificar el crimen cometido. Lino Villar Cataldo, de 61 años, se enfrentó al peligro y al delincuente, esta vez matándolo para evitar que lo maten. La polémica fue generalizada, donde los jueces, fiscales, interrogaban más el accionar del médico y no la actuación del delincuente, por eso nos preguntamos si estamos a favor o en contra de los delincuentes? En nuestro país, por lo que se ve, la justicia es amiga de los delincuentes, y los leguleyos chicaneros son los piojos de tribunales, no todos, pero la mayoría. Están rondando para ver si cae una presa para sacarle un dinerito, no importa que haya matado, violado o secuestrado, total, los jueces en su mayoría son sus capelùes. Y ni que decir los asistentes que son los tiperos de los magistrados, que acomodan los expedientes de acuerdo a los regalo$ que reciben del protector de ese delincuente. Entonces de qué sociedad podríamos hablar? Y si existe una sociedad en nuestro país a favor de quién estaría? De los delincuentes o las víctimas? Ya que el moderador de la seguridad en nuestro país es el presidente pero a éste le importa otro carajo, si este lo que quiere es facturar y facturar nomás. Nunca desde chiquito quien lo conoce, sabe de su arrogancia y para él, es él y nadie más. Sufre de megalomanía y otras cosas que no se puede poner, porque hay que tener como testigo a un proctólogo. Y además pagar una querella cualquiera no puede, según dijo la fuente y el redactor de esta historieta que lo llaman Juan Pueblo.
