El despliegue fue realizado por los agentes especiales de la Secretaría Nacional Antidrogas, junto con el Fiscal de lucha contra el narcotráfico Christian Roi para la destrucción de plantaciones de droga en las zonas boscosas de la región que más marihuana produce en el país sudamericano, principal productor de la droga en el Cono Sur
La destrucción de cultivos evitó que unas 921 toneladas de marihuana salieran al mercado, que podrían haber generado unos 30 millones de dólares en el mercado negro.
El fiscal de la Unidad Antinarcotráfico dijo que los operativos de este tipo continuarán a lo largo del año para disminuir la producción “en vista de que es un lugar que en donde desde hace décadas se está cultivando y es ya una forma de vida de los lugareños”.
“El Gobierno debería implementar políticas sociales de prevención y dar opciones a esas personas”, añadió.
En Paraguay hay entre 4.000 y 6.000 hectáreas de cultivos de cannabis que producen unas 30.000 toneladas de marihuana al año. Que en su mayoría se dirigen a Brasil, pero también a Uruguay, Argentina y Chile, donde alcanza su precio más alto.
El tráfico de esa sustancia es de tal magnitud que ha salpicado a parte de la clase política paraguaya y popularizado entre la ciudadanía el término “narcopolítica”.
