NACIONALES (Realidad Fatídica, por Carlos Roa) En otra demostración más de la falta de interés en los seres humanos que habitamos el Paraguay, periodistas de este medio han viajado a Argentina, más específicamente en Posadas y a Brasil en Foz de Iguazú a conocer en primera persona el trato que reciben los paraguayos que acuden a los centros médicos de los países vecinos, y por supuesto a donde más paraguayos van, es así que llegamos al hospital Nacional Alejandro Posadas donde pudimos comprobar no solo la excelente atención sino la provisión indiscriminada de insumos para los pacientes. Luego se quejan y juzgan a las mujeres que prefieren cruzar puentes e ir a Argentina o a Brasil a tener sus hijos pero no son capaces de entender que la situación con la salud en Paraguay se ha convertido en un vía crucis, mientras que en el INCAN los pacientes reciben un trato denigrante, como ya se ha denunciado en varias ocasiones, otra vez estos deben comprar hasta curita, es decir no hay nada, deben desbolsillarse en busca de salud y cuando acuden al hospital para que se les aplique lo necesario para tratar de extender un poco más su tiempo de vida, otra vez son maltratados.
Hace apenas unos meses, en abril, el doctor que se encuentra al frente del INCAN Raúl Doria fue prácticamente “salvado” ante las denuncias de su pésima gestión, justificando que en este momento no hay luego plata, ya que el dinero que se utilizaba en el INCAN con insumos ahora se destina para el proyecto “Hambre Cero”, y qué significa esto, sencillo es, los enfermos de cáncer son una carga para el gobierno, no merecen atención, prefieren destinar este dinero que podría cambiar la calidad de vida de cientos de enfermos crónicos, a niños hambrientos mientras la ciudadanía se reproduce como conejos. Y qué hacen los ministros? No se busca una solución real a ninguno de los problemas, no hay educación suficiente para entender que es necesario ser responsables para no procrear o bien para hacernos cargos de niños que traemos al mundo y ni un desayuno, almuerzo, merienda digno se le da, las escuelas en total decadencia desde el portón hasta el último árbol. La ministra de salud recorriendo hospitales solo para sacarse fotos, mientras el ministro de urbanismo, vivienda ay hábitat vende espejitos a la ciudadanía haciendo creer que alguna cosa está haciendo este gobierno.
Solamente en el hospital de posadas son atendidos cientos de paraguayos, para cosas sencillitas y para situaciones supera complejas como el cáncer y otras enfermedades crónicas, donde no se les pide absolutamente nada y además se les da el trato digno que cualquier ser humano merece por el simple hecho de existir, mientras en los centros de salud paraguayo te piden cualquier análisis de laboratorio, cualquier estudio de imágenes que por supuesto el hospital no tiene el equipo para hacerlo, salas a la calle de enfrente para acceder al servicio y resulta que el propietario es un médico del hospital, te cobran el doble, el triple de lo que realmente cuesta, porque al final la salud es sólo para lucrar.
Otra cosa que es el pan de cada día en Paraguay y no se ven en los países vecinos es la intervención de los estudiantes de medicina, donde acá desde el día cero están tocando a pacientes, sin tener el menos conocimiento, la mínima noción de lo que se debe hacer, sencillamente experimentando que pasaría si es que le damos tal cosa, le damos tal otra, si le cortas un poquito más acá o más allá, cuantas muertes por negligencia, cuantas secuelas quedan en los pacientes, cuantos niños más deben morir en las panzas de sus madres para que nos demos cuenta de lo mal que estamos y termine esta matanza? Jamás se ve a los directores por ningún lado, nunca están supervisando lo que debe ser su trabajo permanente, sencillamente dejan los hospitales a la deriva.