NACIONALES (enviado especial) El coordinador del Centro de Consejería y Vigilancia de VIH, Francisco Añasco, advirtió sobre el aumento sostenido de VIH en el país.
Francisco Benítez Añasco, coordinador del Centro de Consejería y Vigilancia de VIH, conversó este domingo con radio Monumental 1080 AM y advirtió que se puede decir que el VIH en Paraguay ya es una epidemia, por el aumento sostenido de casos.
“Podemos hablar de una epidemia del VIH porque el aumento es sostenido”, subrayó e indicó que son los jóvenes quienes más contraen el virus, ya que el 60% de los nuevos casos corresponden a este sector.
De cada 10 diagnósticos, 7 son hombres y 3 mujeres. Incluso, hay niños de 10 a 14 años con la enfermedad. “Desde el 2015, registramos a esta franja”, aseveró.
Ante la situación, Añasco señaló la necesidad de la educación sexual y lamentó el estigma contra las personas que viven con VIH.
“Es necesaria la educación sexual porque ahí se les enseña cómo cuidarse. Hay mucho estigma contra las personas que viven con VIH”, prosiguió.
Por otro lado, reconoció la labor del Ministerio de Salud, que brinda medicación gratuita a las personas que luchan contra la enfermedad y con el tratamiento, buscan una mejor calidad de vida.
“Paraguay brinda medicación gratuita, es algo que hay que reconocer al Ministerio de Salud. Tenemos que trabajar en que las personas con VIH sigan con su tratamiento, hay violación en la confidencialidad”, puntualizó.
Por último, Añasco manifestó que hay riesgo de contraer enfermedades al tener relaciones sexuales sin protección o tener varias parejas sexuales.
“Los muchachos suelen usar su preservativo que está guardado en la billetera hace un mes. Eso es peligroso. También hay que fijarse en la fecha de vencimiento del condón”, concluyó.
El Ministerio de Salud Pública registró el año pasado un incremento del virus de inmunodeficiencia humana (VIH) a nivel país.
Durante todo el 2022 se registraron 1.519 nuevos diagnósticos, de los cuales 459 fueron categorizados como sida.
Unas 435 son mujeres, de 15 a 21 años, de las cuales el 29,04% estaban embarazadas. El resto, 1.084 hombres, de entre 20 y 34 años, que representan al 71,36% de la totalidad