CIUDAD DEL ESTE (Realidades, por Charly Friend) Vinícius Júnior, jugador del Real Madrid y de la selección brasileña, ha sido víctima de múltiples incidentes de racismo en los estadios de fútbol, especialmente en España. Durante varios partidos, ha recibido insultos racistas por parte de aficionados, lo que ha generado un intenso debate sobre el racismo en el deporte y en la sociedad española. Estos incidentes no solo afectan a Vinícius como individuo, sino que también reflejan un problema más amplio de discriminación racial que persiste en muchos lugares.
En Paraguay, existe una situación particular con las comunidades brasileñas conocidas como brasiguayos. Estos son brasileños que han migrado a Paraguay y, en muchos casos, han establecido comunidades significativas en el país. A pesar de vivir, nacer y criarse en Paraguay, muchos brasiguayos no se integran completamente ni se identifican con la cultura paraguaya. Esta falta de integración ha llevado a tensiones y, en algunos casos, a discriminación mutua.
Los brasiguayos, en su mayoría de piel blanca, a menudo se perciben como diferentes de la población paraguaya, que tiende a ser más morena. Sin embargo, más allá del color de piel, la discriminación se manifiesta en el trato cotidiano. La realidad es que estos brasiguayos tienden a tratar a los paraguayos como inferiores, lo que genera resentimiento y conflictos dentro de las comunidades
La discriminación, ya sea en el ámbito del deporte o en la vida cotidiana, es un problema que debe ser abordado con seriedad y compromiso. Los incidentes que ha sufrido Vinícius Júnior son un recordatorio de que el racismo sigue siendo una realidad para muchas personas. En Paraguay, la situación de los brasiguayos destaca la importancia de promover la integración y el respeto mutuo entre diferentes comunidades.
