CIUDAD DEL ESTE (reflexión, por redacción) Las mejores parejas, las más hermosas, son aquellas que por encima de ser matrimonio, novios o amantes son amigos. Juegan, se pelean, se burlan el uno del otro, se muerden, se pellizcan, discuten, se pelean, pero se aman de una manera que ninguna persona del mundo puede dudar. Amor no es sólo besos y carantoñas, amor es cuidado, amor es cariño, amor es amistad.
Estudios indican que las parejas que son más felices, lo logran cuando tienen grandes dosis de afecto, complicidad y comunicación. El índice de separaciones y divorcios aumenta porque faltan los factores antes mencionados
La complicidad en pareja es uno de los aspectos más importantes dentro de la relación e implica un entendimiento profundo que va más allá de las palabras que se intercambian; supone la empatía, la comunicación y la cercanía entre ambos.
Esto parte de un amplio conocimiento del otro; sin embargo, muchas parejas pierden esta facultad cayendo en la monotonía, según explica Eliécer Pérez Rivera, psicólogo y psicoterapeuta de parejas y familia.
Pero, ¿cómo se puede rescatar la complicidad? Según el psicólogo, es importante romper con la rutina, que en ocasiones desgasta mucho las relaciones. “Hay que valorar los detalles, la confianza y la comunicación de uno con el otro. Todas estas piezas juntas hacen que la relación sea más sólida”, explica Pérez
Otro punto a tomar en cuenta es el respeto entre las dos personas, incluso en los momentos más complicados. “Las ofensas o los malos entendidos deben evitarse para prevenir una ruptura de la que después se puedan arrepentir”, dice el psicólogo.
Por su parte, el psicólogo y sexólogo Silvestre Faya agrega que la complicidad sexual tiene diversos beneficios: comunicación, tener un lenguaje compartido a fin de lograr una relación más sólida, basada en la confianza, pero todo esto se logra aceptando que cada uno tiene una forma de vivir e interpretar la existencia, es decir se respetan uno al otro.
“Los cómplices en la sexualidad no exigen proezas eróticas, simplemente se dejan llevar por sus pasiones y se recrean en cada encuentro íntimo”’
“Entre dos personas cómplices se crea una atmósfera que se convierte en una suerte de profecía emocional que enlaza los sentimientos y los corazones. En este caso, la felicidad es producto de la complicidad”, subraya.
Además, para generar la complicidad con la pareja al iniciar una relación, como para mejorar la complicidad, es fundamental generar y gestionar la confianza entre las partes.