CIUDAD DEL ESTE (religión, por Carlos Roa) Hoy comienza la cuaresma, conocido por muchos como miércoles de cenizas, que trae un significado muy peculiar para muchos individuos que están empotrados en los cargos público, en el gobierno, los ministerios, gobernaciones, fiscalías, poder judicial, municipalidades y otros entes del estado donde individuos avasallados por la ignorancia, pero con sueldos jugosos y cargos mirabolantes que ocupan hurreros y otros operadores políticos.
En estos tiempos de cuaresma, que es de arrepentimiento y perdón, estos politiqueros deberían tomar ejemplo y tratar de reflexionar un poco, pero sabemos que es misión imposible que estos se arrepientan de sus hechos, y mucho menos dejarán de libar el dinero pagado por el contribuyente. La Cuaresma es el tiempo litúrgico de conversión, que marca la Iglesia para prepararnos a la gran fiesta de la Pascua. Es tiempo para arrepentirnos de nuestros pecados y de cambiar algo de nosotros para ser mejores seres humanos y poder vivir más cerca de Dios. Pero esperar eso de la clase política es prácticamente imposible, por lo que éstos deberían ser crucificados o al menos flagelados en la vía pública, ya que jamás se auto flagelarían, como lo hacían antiguamente los monjes y curas para limpiarse de sus pecados.
Esperemos que en estos tiempos de cuaresma ocurra algún milagro y el espíritu del Dios todopoderoso pueda descender sobre los corazones de nuestra clase política y hacerlos un poco más sensibles hacia las necesidades de sus prójimos, que mientras ellos viven en lujos y abundancia, sufre a diario para sobrevivir.
