CIUDAD DEL ESTE (Nacionales, Magenta López) Desde que se dieron los primeros destellos de la pandemia en Paraguay hemos sido testigos de varias situaciones en donde ciudadanos que forman parte del personal de blanco del país fueron callados en diferentes momentos pero todos por la misma razón, decir la verdad, exigir lo correcto y exponer al Ministerio de Salud, al Ministro Julio Mazzoleni y al Pte. Mario Abdo Benítez, sus decisiones, gestión y las consecuencias de esto.
El Dr. Jesús Agustín Irrazabal Rojas quien era jefe de neonatología publicó en su cuenta de Facebook, ayer, que se retira de Neonatología, luego de un 2020 donde fue titular varias veces por hacer denuncias en redes sociales sobre cómo se estaban manejando la situación pandémica y donde rápidamente personal del Ministerio salía a desmentir estas denuncias y a decir que eran falsas, en fin, sabemos quiénes son los que realmente mienten y hoy queremos hacer pública la despedida de alguien que realmente puso la camiseta por el pueblo, un soldado más que estuvo hasta el último momento al frente de batalla, arriesgando su vida y la de su familia y sufriendo con los enfermos, la necesidad de la pobreza y el abandono de quienes buscan salud.
Amigos/as, compañeros/as, aceptaré salir de Neonatología como médico de guardias en el Hospital Bo. Obrero, algo muy malo habré hecho y espero que me digan qué fue. Habrá sido la dextrosa al 10 %, haber criticado la falta de agua destilada, o mis llegadas tardias, que será?, que será?. Acepto salir, no hay puerta grande por donde salir, y la frente alta es para la soberbia sin contenido, es que quien pretende sabiduria cultiva la humildad, no tengo ninguna de las dos, asi que cultivare la verdad, por lo tanto la mentira, la falsedad y la hipocresía seran la yerba mala que buscaré arrancarlas de raíz. No dejare nunca de defender los derechos de los pacientes y de las madres.
Los “compañeros” tova-mokõi que no se atreven a explicarme, espero alguna vez maduren su sociabilidad y comprendan que si no trabajamos y luchamos por los demás, siendo médicos, somos socialmente negligentes. Emociones y afectos se mezclan subjetivamente pero hay que conservar la objetividad, y sobretodo la dignidad, cuidar de la dignidad del paciente y sus familiares es cuidar de mi dignidad como médico.
No se en que parte del hospital iré, sera el frizer?. Congelare mis barbas, y honrare mi nombre siendo una voz que clama en el desierto, otra vez. Mi reconocimiento pleno a mis compañeras y compañeros de enfermeria, amigas y amigos que ocupan un primaveral espacio en mi corazón, verdaderas/os guerreros del servicio de Neonatología. Que la atención en calidad y equidad nos encuentre estratégicamente…. juntos.