El albañil Rafael Ayala Mercado (39) mató a sangre fría a su pareja Clara Belén Álvarez Fernández (26), con quien tenía 10 años de convivencia.
El hijo de 8 años de la pareja vio aterrado cómo su papá apuntó su revólver a la cabeza de su mamá y disparó a quemarropa, para luego escapar.
El pequeño corrió a pedir socorro a su abuela, quien vive cerca de su casa. Mientras que en el lugar quedaron las hijas gemelas de 2 años de la pareja, que no entendían de lo que había sucedido con su mami.
Ocurrió a las 17:30 del viernes, en la colonia San Roque, en Iruña, Alto Paraná.
Los agentes de la Subcomisaria 43 lograron apresar al feminicida y de su poder incautaron un revólver calibre 22.
Ocurrió ayer 20 de setiembre a las 17:30 en el interior de una vivienda ubicada en la colonia San Roque del citado distrito.
La víctima presentó herida de arma de fuego en el rostro, presumiblemente revólver calibre 22. Como supuesto autor fue aprehendido su pareja Rafael Ayala Mercado, de 30 años. El mismo fue sometido a la prueba de alcotest, arrojando como resultado positivo 0,611 mg/L
El hombre quedó recluido en la Comisaría 18.ª de Santa Rita, sujeto a la disposición judicial. Intervino en el lugar del supuesto feminicidio el asistente fiscal de turno, abogado Ernesto Areco, de la unidad zonal de Iruña, a cargo de la fiscal María del Carmen Meza.
También fueron convocados agentes de Criminalística, a cargo del suboficial inspector, Carlos Orué, para el procedimiento de rigor. El médico de guardia, Cristian Irala, diagnosticó como causa probable de la muerte: trauma cráneo encefálico grave por proyectil de arma de fuego
VARIAS VERSIONES
Tras ser aprehendido, el tipo primero dijo a la policía que estaba aperitando y manipulando su revólver y que se le escapó un tiro que impactó en la cara de su señora. Luego, cambió su versión y dijo que entraron unos asaltantes a la casa y le dispararon a Clara Belén.
Añadió que se asustó al ver el cuerpo y por eso escapó y se metió al monte. Finalmente, el sospechoso cedió ante el interrogatorio de los agentes y aceptó que fue él quien le disparó.
Martha Álvarez, hermana de la víctima, señaló que su cuñado se drogaba y tomaba mucho.
Aseguró que sus vecinos le tenían miedo a su cuñado por ser muy argel al estar drogado, ya que amenazaba a todos con su arma. Ella cree que la pelea se debió a celos, sumados a la borrachera del feminicida.
HABRÍA SIDO EN PRESENCIA DE LOS HIJOS
“El hecho habría ocurrido en presencia de los tres hijos menores menores de edad, la escena demostraba salpicadura de sangre en varias dependencias de la casa y se observó mucho desorden en la vivienda por lo que se presume que hubo pelea”, dijo la fiscal María del Carmen Meza.
Informó además que fue encontrada el arma presuntamente homicida. “La investigación va a determinar si la pelea fue entre la pareja o hay un tercer involucrado, presumiblemente el padre de la víctima habría intentado defender a su hija”, mencionó la fiscal que investiga el hecho. Agregó que todavía se desconocen los detalles del inicio o desencadenante de la tragedia.
