CIUDAD DEL ESTE (realidades, por redacción) Un escándalo se le armó a la ministra de Salud, María Teresa Barán, ayer cuando se presentó en la Gobernación de Alto Paraná para una firma de convenio. El momento fue aprovechado por algunos referentes sociales y del personal sanitario para gritarle en la cara que la salud pública actualmente está podrida, que la estructura del Hospital Regional ya no abastece y se necesita urgente un nuevo establecimiento sanitario para el décimo departamento. Se tomo la iniciativa debido al hartazgo de la ciudadanía ya que el gobernador Cesar Landy se pasa vendiendo estrellitas en vez de contar la realidad de los hospitales y las necesidades de la zona, lamentable como este señor hasta ahora no hizo nada, un verdadero florero
“Ministra, agradecemos que hayas venido a visitarnos, pero no necesitamos tu parche (convenio entre IPS y MSP), no es la solución que buscamos y no nos sirve. “Nuestro hospital actualmente se encuentra colapsado y el sistema de salud que tenemos es una vergüenza”, le espetó la concejal departamental Julia Ferreira. Esto fue cuando se anunció el cierre del evento en el cual la secretaria del Estado llegó para firmar el convenio con representantes de partes. En la sala de reuniones de la Gobernación, la actividad se desarrolló CON normalidad con protocolo preestablecido para la firma de convenio y entrega de resolución a la Región Sanitaria, hasta que ocurrió el bochorno. Desde la semana pasada se debatió que la fusión de servicios entre el Ministerio de Salud (MSP) y el Instituto de Previsión Social (IPS) se daría. Sucedió como tal: eso generó descontento a algunos participantes.
Teresa Barán esperó que el acuerdo pudiera calmar el hartazgo de la población ante la necesidad y prolongado proyecto del Gran Hospital del Este. Sin embargo, varios grupos estaban esperando encontrarse con la misma, pero no hubo ocasión. Igualmente, lo que se le dijo representó a la mayoría. La Dra. Idalia Medina fue tajante en reprocharle en la cara que la situación de salud no es como se pinta desde el gobierno. DE TODO En un lapso de una hora aproximadamente le dijeron de todo a la Dra. Barán. Primero empezó la activista social Ana Borba y siguió la edil Ferreira. La franqueña Rosita Medina fue contundente; se acercó a la ministra y le pidió no mentir más, que no hay insumos, y se hacen “pecheo” para conseguirlos. Le recordaron que los hospitales del país están politizados y que ella, como alta autoridad de Salud, debe sanear la institución. Le pidieron que converse con la saliente directora del hospital de Pdte. Franco, Dra. Marta Sosa, para pedirle que vuelva; su salida fue una injusticia, le argumentaron. Le citaron al Dr. Federico Schrodel del Hospital Regional, que es uno de los pocos profesionales que lucha por la gente, pese a su limitado recurso. De Hernandarias también se le pidió para solucionar el tomógrafo tirado en un depósito y abandonado. En síntesis, la Dra. María Teresa Barán fue encarada en serio