CIUDAD DEL ESTE (Realidad Fatídica, por Esteban Ross) El 29 de junio del 2022 un niño de 4 años murió en un trágico evento que sucedió frente a la escuela del Área 1, donde se encontraba con su madre, dentro del automóvil familiar, esperando la salida del hermano mayor que estudiaba en el colegio, el menor fallecido se encontraba jugando con una pelotita que sin querer salió por la ventana y el pequeño bajó del auto, sin previo aviso, a buscar su juguete momento en el que fue atropellado por una camioneta, el pequeño infante murió por un politraumatismo. Llamativamente ese mismo año, en febrero del 2022, la dirección de la Escuela Área 1, “Augusto Roa Bastos”, solicitó al intendente Miguel Prieto la instalación de al menos un reductor de velocidad frente a la escuela, solicitud que hasta hoy no ha sido atendida.
Los conductores que no respetan la Zona Escolar, y se manejan a altísima velocidad, sumada a la grandiosa cantidad de alumnos que ingresan tanto en la escuela en el turno mañana y tarde, como en el Colegio Área 1 “Prof. Atanasio Riera”, los transportes escolares, los menores que se acercan a pie e incluso en bicicleta, y las motos que se escabullen por los rincones, entre los autos, sin ningún respeto hacia los demás, estacionan y se trasladan sobre las veredas, son un peligro constante para todos los que por allí pasan en horarios de entrada y salida de las respectivas instituciones educativas.
Es así que un grupo de padres, preocupados, han solicitado en reiteradas ocasiones la presencia de la Policía Municipal de Tránsito, a fin de evitar otra tragedia, y mientras se espera la instalación de los reductores de velocidad que como toda actividad en la vía pública tiene su reglamentación y su costo, ante el silencio y el desinterés del intendente y demás autoridades locales son los padres quienes han vuelto a pintar la franja peatonal frente a la escuela e incluso fungen de policías de tránsito en una desesperada búsqueda de ordenar y organizar el paso, pero sobre todo resguardar y proteger a los menores que asisten a la institución.
Lastimosamente han comprobado que el intendente envía a los PMT pero sólo van dos o tres días, siendo insuficiente ya que incluso muchos padres asociados a la institución no respetan algo tan simple como la franja peatonal, estacionando encima, pasando a alta velocidad, no ceden el paso a los alumnos que esperan para cruzar y se suman los conductores que utilizan ese trayecto que además ofenden a los padres que se encuentran en la calle tratando de ordenar y educar a los que pasan.
Por otro lado, en la Avenida Amado Benítez en horas de la mañana y de la tarde se puede ver a tres o cuatro PMT organizando el tránsito en el horario de entrada y salida de los estudiantes del Colegio Brítanico (British School), pero cuando se cuestiona esto en la municipalidad de CDE la respuesta es que no hay suficientes agentes.. así también no hay presupuesto para los reductores de velocidad que se solicitaron, recién el año que viene se podrá pensar en el asunto, por qué así la diferencia en el trato de la municipalidad donde niegan a una escuela pública el mismo trato que tienen con un colegio privado??
Mientras tanto son los padres los que hacen el trabajo de la PMT, a fin de evitar otra tragedia como se dio en el 2022 y como ha sucedido ya varias veces en nuestro país, no sólo en CDE, lamentablemente toca educar a todos, no sólo los conductores, también los peatones que no están acostumbrados a utilizar la franja peatonal, todo sea por proteger a los menores.