El saldo rojo de 21 millones de dólares de Petróleos del Paraguay (Petropar) es en su mayor parte consecuencia del combustible subsidiado que es entregado a los empresarios de la soja. El 52% del gasoil consumido en el mercado local corresponde a la producción de la soja y su transporte. “El Estado debe alrededor de 300 millones de dólares a PDVSA como consecuencia de otorgar un subsidio a los empresarios más ricos, que menos impuestos pagan y que más evaden, quienes además arrasan con poblaciones enteras, depredan los bosques, contaminan el aire, las tierras, las aguas profundas y superficiales y los seres humanos y destruyen los caminos. Y como si no fuese suficiente vos y yo tenemos que subsidiarles el gasoil”, afirma la fuente.
A pesar de ser uno de los sectores con mayor renta, los productores de soja son los que menos aportan al fisco. De acuerdo a datos de la Secretaría de Estado de Tributación del Ministerio de Hacienda, las 30 empresas sojeras mejor ranqueadas del sector aportaron solamente el 1% de las recaudaciones, unos 78 millones de dólares, con un volumen de exportaciones de 4.000 millones de dólares. Estas además gozan de la devolución de millonarias sumas en concepto de crédito fiscal por las exportaciones.