CIUDAD DEL ESTE (Por Charly Freenz) En una actitud patética y desvergonzada, lo que ocurre en las instituciones del Estado, en donde muchas veces tendrían que estar personas capacitadas y aquellas que gozan de la meritocracia, como lo dijo alguna vez otro de los grandes granujas de este país, HC. No fue solamente él quien minó las administraciones públicas de partidarios, en lo que se llama pago de favores políticos, donde por ejemplo en Itaipu se ve un carnicero como consejero, y que ganan jugosos salarios, pero realmente su profesión es bandidaje, hurrerismo, cuatrerismo, sinverguenzía y deshonestismo. Veremos uno de los tantos ejemplos el caso de este ingeniero mau, que fue director ejecutivo del Parque Tecnológico Itaipú (PTI) por la binacional, Diosnel Ramón Dávalos, de este gobierno, pero que sorpresivamente un día sin querer queriendo se descubrió que este no tiene título ni de cartulina y hoy se hace de víctima de porqué ndaje le echaron.
Porque con un salario como vendedor de chura no podrá vivir también, como dijo trato apu´a Ovelar. Nadie les dijo para llevar una vida de rey, simplemente descubrieron las mañas de la vida, la politiquería es el mejor empleo para grandes sinvergüenzas, cínicos y embusteros. Y para que vean, caros lectores, un empírico usurpó un cargo que por derecho propio ni meritocracia no le correspondía. A no ser que quisiera ser macumbero de la electrónica y la informática y por ahí cerca tendría su terrero o centro de Umbanda, donde hacía sus contactos con el más allá para protegerlo de esta falacia o como dirían en paraguayoité, sus yapúes.
Dávalos, al falsear que era profesional con título universitario, fue calificado como profesional nivel III en la planilla de funcionarios de la Itaipú, cobrando de los más de G. 26 de millones de salario, un plus superior a G. 16.000.000, además de otros beneficios, llegando a un total de G. 48 millones. Ahí ponemos un punto suspensivo de esta marra, se dan cuenta señores paraguayos comunes, el sueldo mínimo en Paraguay es de 2.152.000 guaraníes, y el que lo ejerce tiene que romperse el lomo y en muchos casos, acostándose con los jefes de mandos medios como ocurre en la agrotabacalera de Choré Y estos badulaques ni siquiera saben donde nació el asterisco ganan 48 millones sin hacer nada. Lo más seguro que este es especialista en hurrero, en gritar Viva Marito, y a los comunes que les rompa el culi….