CONDUCIR CON EL “CEL” ES LO MISMO QUE HACERLO BORRACHO
CIUDAD DEL ESTE (Carlos Roa) La tesitura de la actualidad de hoy día por los grandes avances tecnológicos creado en el año 1984 por Martin Cooper, el cel como le llaman los chabacanos o faranduleros de nuestro país. Pero sin embargo este avance tecnológico también es paralelo de una trampa mortal, eso está muy bien comprobado en muchos países, donde los conductores de alta gama, como así también los colectiveros urbanos interurbanos, taxistas, combistas, en fin, ese grupo de conductores de vehículos que utilizan el teléfono celular mientras están conduciendo los móviles. 15% a 20% de los accidentes automovilísticos se deben al uso de dispositivos (teléfonos celulares), que los convierte en la 3ª causa de accidentes en el mundo tan sólo después de conducir a exceso de velocidad o bajo estado etílico.
En Paraguay usted verá en varias ocasiones y oportunidades que el conductor del transporte público o interurbano constantemente está chateando, watsapeando, feisbukeando y hasta preguntando a su quinielero que número pa vino a la cabeza, en pleno viaje. Y por sobre todo, estos están transportando vidas humanas. Según pesquisas el apretar una tecla para responder un mensaje de un teléfono celular ocupa un 10% de distracción al usuario, y es el tiempo necesario para una tragedia. Sin embargo, la ley 5016/14 prohibe el uso de celulares al volante, matear y tererear cuando uno está conduciendo, no obstante esta ley es puro bla bla porque lo que más se ve en Paraguay es mateando, terereseando, chateando, feisbukeando y mensajeando a las yiyis o la vecina de la patrona, que tiene unas lindas curvas, que hace viajar en alta velocidad la imaginación de ese casado conductor de colectivo o taxista, en fin cualquier individuo que esté al volante en la situación de utilizar el teléfono celular es peor que conducir en estado de embriaguez. Las autoridades deberían de tomar las riendas y ser estrictos sobre este tema, que acarrea muchas problemáticas, que son los accidentes, los accidentados, los mutilados, la familia que gastó todo su dinero para recuperarlo, que también quedó en grave estado económico, y el Estado, que tiene que desangrarse por situaciones, que si fueran controladas, como dice el conocido Dr. Filártiga, usá casco carajo o no conduzcas borracho, pedazo de alcornoque. Estas son las realidades fatídicas que acarrea la tecnología y el avance que vino a través de este Martin Cooper que realmente es bueno, porque hoy en día los terrestres tienen comunicación en todo el planeta y quizás dentro de poco si lo utilizan de esta manera, también con San Pedro o Lucifer.