Trata de mujeres y explotación sexual en Santa Rosa del Aguaray
SANTA ROSA DEL AGUARAY (Claude Samaniego, enviada especial) Este distrito en pleno desarrollo urbanístico y poblacional se encuentra infestado por una de las profesiones más antiguas, que es la prostitución. Pero lamentable y gravitante en esta cuestión es que la mayoría de las mujeres en actividad son menores de edad, como en la famosa Casa Azul, ubicada en el barrio San Ramón y otras, que existen en los alrededores. Pululan menores de 14, 15 o 16 años, que están en un estado de servidumbre, sin ningún tipo de protección, ni sanitaria, ni una jueza, mucho menos la Fiscalía, aún menos la Policía, la Codeni municipal, donde en entrevistas hechas a este medio, relataron que existe un mecanismo burocrático tan efímero, que para llegar a realizar una intervención, se debe pasar meses, años y tal vez termine en la cesta del opa´reí.
El comisario principal Carlos Cáceres, titular de la comisaría de Santa Rosa del Aguaray, dijo “no puedo hacer nada al respecto, porque cuando llego al lugar, la meretriz o el caficho me exigen para ingresar al recinto una orden de allanamiento, lo cual es difícil de conseguir, según el comisario. Sin embargo, como se trata de un delito de flagrancia, la Policía está facultada a actuar, sin necesidad de un mandato judicial previo. Por lo que las expresiones del comisario huelen a excusa barata. Un asistente fiscal nos relató que para acceder a estos tipos de intervenciones, hay que investigar, hay que solicitar, hay que cumplir un montón de diligencias burocráticas, mientras tanto la menor sigue siendo abusada en sus derechos y su intimidad. Tal vez no sea porque quieran, sino por necesidad, pero de igual manera los cafichos y meretrices tienen que estar en las mazmorras.
Fuentes de última nos revelaron que la Fiscalía, o sea, los asistentes y secretarios, son asiduos frecuentadores, como así también algunos fiscales, motivo por el cual los propietarios de los lupanares de esa localidad se sienten protegidos. Amén!
