CIUDAD DEL ESTE (Realidad Fatídica, Carlos Roa) Y bueno, por fin llegó la semana de las reconciliaciones, creado por los fariseos o sea más bien ampliado de una forma comercial porque realmente san Valentín era un pa’i que vivía en Roma y que realizaba casamientos de personas de ambos sexos que se amaban y en aquel entonces era prohibido porque el sexo era más a gusto y paladar, fue allí cuando los fariseos utilizaron esta fecha y en la mayoría fariseos comerciantes, y crearon que el 14 es el día de comprar regalos para los enamorados tanto el como ella.

Una historieta con gastos, y así como está existen muchas fechas conmemorativas que son simplemente comerciales veamos según hoy la grilla del antes del 14 y  el después, el 12 de febrero es el día del novillero, el que le novillea a la vecina o la vecina le mira con ganas de que te quiero comer al vecino y mucho más si tiene un cuerpo como el gladiador Spartacus, el 13 de febrero dicen que es el día del amante, aquel hombre que se encuentra a escondidas con la mujer del 14 y así por delante llega el 14 de febrero, el día de los enamorados, donde hay un intercambio de regalos, de besos, caricias, meneos y hasta extasis, pero llegando la media noche del 14 los gemidos se van apagando y amanece el 15 de febrero, el día mas trágico, donde después de una borrachera o de un encuentro de amoríos se miran y se reprochan “no te quiero ni ver” mientras tanto la falquitreras quedaron vacías y esto es el día de los enamorados que se están preparando los comerciantes para vender todo lo que puedan y los supuestos enamorados entrar en deuda y gastar lo que puedan no importa si tienen que vender o alquilar su alma al demonio.