AMAMBAY (Enviado Especial) Ayer nos daban la noticia de que un nuevo enfrentamiento entre el grupo guerrillero EPP y la FTC dejó como saldo la muerte de dos indígenas y del líder del grupo armado. Supuestamente esta es una vitoria para la ciudadanía y para el estado de derecho. Realmente después de tantos años de que esta zona del país ha vivido en zozobra constante por la falta de seguridad respecto a estos grupos, aunque según dicen, en comentarios por lo bajo, entre Amambay y Concepción siempre supieron dónde estaban escondidos todos, incluso se decía que durante el día estos trabajaban en los cultivos de sus parientes y solo por la noche se internaban en el bosque, lugar de donde ni la FTC podía sacarlos pero finalmente este grupo especializado ha logrado parte del trabajo para el que fue creado.
Sin embargo los daños causados en tantos años de actividad delictiva no podrán ser borrados ni olvidados ni recompondrán a las familias que han sido fracturadas. El presidente de la República Mario Abdo Benitez que llevará entre sus logros la derrota final de quien fuera el máximo líder actual del grupo armado Osvaldo Villalba, pero no debemos ser tan ilusos y pensar que aquí termina todo, en realidad no sabremos hasta que se manifiesten, qué repercusiones tendrá lo sucedido, el Presidente se dirigió a los demás integrantes con las siguientes palabras. “Esta no es la forma de luchar por lo que uno piensa, por los ideales que defienden. Nosotros volvemos a hacer un llamado para que haya paz en el Paraguay, para que no tengamos estos hechos de violencia entre paraguayos. Que depongan las armas y nosotros le damos todas las garantías de someterse al debido proceso. El Paraguay requiere el reencuentro de su gente, de su pueblo y hoy de vuelta como comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas de la Nación, como presidente de la República, hago un llamado a la Paz, para que puedan entregarse y que estos hechos de violencia queden atrás ..”
La comunidad indígena y quienes luchan por los derechos de los nativos lamentan el asesinato del líder Alcides Romero quien fuera un gran defensor de los derechos indígenas y un líder en la comunidad, supuestamente este fue ejecutado por el EPP antes de la caída de Osvaldo Villalba.
Casualmente todo esto que podemos llamar “buenas noticias” para el país ocurren en puerta de las elecciones presidenciales, ocasionando una vez más la desconfianza de la sociedad paraguaya que manifiesta en redes lo que piensan que realmente es, simplemente una “cortina de humo” para desviar la atención a alguna otra actividad que se pudiera estar realizando mientras todos atendemos y algunos hasta celebran estos hechos.