CIUDAD DEL ESTE (reflexión, por Carlos Roa) Los grandes compañeros de la vida, en donde a veces hay una lucha de titanes para llegar a un acuerdo. De un lado, la mentira, y por el otro, la verdad. La Mentira le dijo a la Verdad: “Vamos a darnos un baño juntos, el agua del pozo es muy agradable. La Verdad, todavía sospechosa, probó el agua y descubrió que era realmente agradable. Así que se desnudaron y se bañaron. Pero de repente, la Mentira saltó del agua y huyó, vistiendo las ropas de la Verdad.
La Verdad, furiosa, salió del pozo para recuperar su ropa, totalmente despabilada. Pero el Mundo, al ver la Verdad desnuda, miró hacia otro lado, con ira y desprecio. La pobre Verdad regresó al pozo y desapareció para siempre, ocultando su vergüenza. Desde entonces, la Mentira corre por el mundo, vestida como la Verdad, y la sociedad está muy feliz … Porque el mundo no desea conocer la Verdad desnuda. Lo que ocurre realmente en nuestro país, a mando de un descerebrado desclasificado presidente de la Repúblico, abanderado por un partido que tal vez no sea tan culpable como sus asociados o afiliados. Decimos asociados porque son todos socios para delinquir, para vestirse con la verdad, mientras que son grandes mentiras.
De esto viene esta reflexión, donde estamos todos ataviados por la gran mentira de las vacunas, por las mentiras de los políticos que dicen que harían todo por ud. antes de las votaciones y después viene la gran mentira, con la ropa de la verdad. Así como ocurre esta narra al inicio, donde hoy día un grupo de 200 personas saquearon el país, donde la torre de Hankell en la cima se ve la Constitución Nacional y en el quinto lugar los decretos. Hoy por hoy, el decreto suena más fuerte que la constitución, en manos de estos grandes sinvergüenzas, como Marito, su finado padre y el grupo que lo rodea, embanderado por un scarface (cara cortada) que realmente es el cáncer o tal vez el Covid paraguayo. Que utilizando mecanismos de compra y venta convirtió y engañó a la verdad con las grandes mentiras publicadas en sus medios. Grandes mentiras que el pueblo no levantarse, así como el debacle que tuvimos en la guerra de la triple alianza. Estamos gateando por la vida, donde hoy simplemente salen a decir “murieron 100, murieron 30, murió el Dr., murió la enfermera”. Lo raro en toda esta historia es que la enfermera y el doctor fueron vacunados y las vacunas son solamente para los abuelitos. No suena a exterminación humana? Una gran mentira disfrazada de la real verdad.