RECUENTO 2020
CIUDAD DEL ESTE (realidad fatídica, por Carlos Roa) El día miércoles 03 de junio entrevistamos al administrador de Aduanas Guillermo Vega Lemir, sobre el supuesto robo de 50 mil dólares, que según los secretarios manifestaron a este medio que por tal motivo fueron todos despedidos de sus puestos. Comunicado directamente por el administrador, donde les dijo ¿cómo piko vamos a robarnos entre ladrones? Fue cuando éste dio un salto, golpeó la mesa y hasta yo creí que iba agredir al periodista de este medio, que lo estaba entrevistando. Y salió con el verso “yo soy creyente y no puedo mentir, lo que dicen es todo mentira, solo 300 mil guaraníes es lo que se perdió”. También contó otra versión, que en la oficina donde se hacen fotocopias también se perdió plata.
Pero averiguamos un poco más y el comentario dice que en estos días hubo un descargue de 90 mil kilos de mercaderías y podría ser las sumas y restas, el decomiso o simplemente para agregar a las cuentas del clan de los 50 hombres del patíbulo, conocidos de dicha logia que pertenece al director de Aduanas Julio Fernández, para la repartija del día sábado, donde se reúnen todos y claman “oremos manté ha peemo nákore” es decir que el dinero sería de ellos, pero por la reacción que tuvo este señor, el 99% sería verdad lo que comentan los secretarios que conocen cada movimiento de los aduaneros del aeropuerto Guaraní. Bueno, también nos enteramos que el mismo día este se fue a Asunción a pedir socorro al director, porque le iban a publicar por el dinero desaparecido, según dicen las fuentes. Lo cierto que estos se amparan en la tesitura mostrame la prueba. Y claro que es lógico que estos no serían tan benévolos y llamarían en el momento de ajustes, transas a un periodista que haga la imagen y sea testigo. ¿Por eso no podemos afirmar porque no existe flagrancia, porque no van a llamar a decir señor periodista, 90 kilo oike Kuri, che ngo amofigurata chupé 50 mil ha pe 40 mil repy jajo repartí”, epillá? O como decía Al Capone, Capicce?
A pesar de que el informe es
de un funcionario de adentro, que pasó la info. Aviones vienen y van, dejan sus cargos, algunos esperan días para pesar, y luego salir en horas más propicias del aeropuerto Guaraní. Otros con documentos fraguados o articulados con un rotulo en tránsito van hasta el km. 11 y medio en otra estación aduanera conocida como Global. Y para que este teje y maneje, y para las transacciones, la coima, la bicicleteada o el matute.
Pero bueno, que vamos hacer, vino la pandemia, le trajo al protagonista principal, el Covid-19, y las instituciones madre de este país también lanzó su virus y lo bautizaron como los Pokovid-2020. Veamos cómo termina esta historia, si el director le cambia es porque es cierto, y si no le cambia, es porque es cómplice. Hasta la próxima.
