CIUDAD DEL ESTE (Corrupción, por Carlos Roa) Es aberrante la forma como se manejan la justicia en nuestro país donde los supuestos promotores de la transparencia y de que se cumplan las leyes son los primeros corruptos. En este paquete vemos como Jueces, Fiscales y abogados concatenan para dar privilegios a la chicanería. Todavía tengo pendiente una demanda por supuesta difamación, calumnia e injuria numero en mi contra presentada por el Director de Aduanas Julio Fernández, causa que está próxima a cumplir un año sin ir para ningún lado, más que hacernos perder el tiempo a todos postergando y postergando mientras el contrabando sigue vigente en las principales aduanas del país.
En tiempos de la pandemia cruda he publicado las fórmulas y formas del contrabando que según nuestras fuentes que eran propios funcionarios de aduana y nos pasaban al hilo la información, era y es realizado bajo el visto bueno de los funcionarios aduaneros y con su respectiva ganancia para cada uno y para todos realmente porque hasta los que están ahí usurpando cargos reciben un pedazo de la torta, y digo que son usurpadores porque estos mal llamados secretarios no son funcionarios de las Aduanas pero como nos confirman nuestras fuentes son lo que sin ninguna autoridad ni control manejan las herramientas de las institución, teniendo acceso al Sistema Sofía, manipulando documentos de entrada y salida, de kilaje entre otros.
Es así que una que inició también como secretaria consiguió su nombramiento totalmente irregular en plena pandemia donde estaba prohibido por resolución presidencial otorgar nuevos cargos, y según nuestra fuente la tal Maluma logró este cargo al realizar una denuncia falsa en mi contra con intenciones de coartarme por las publicaciones hechas en este medio contra la corrupción vigente en los 32 puestos de control aduanero de nuestro país, ella me acusa de supuesto chantaje y violencia de género siendo que yo nunca ni ojito le hice y lo más simpático del tema de Maluma es que el Fiscal al momento de ir a realizar el peritaje me dijo “mmmmm ikuero porãite co mitakuña” y él mismo se encargó de traer y llevar todo lo necesario, por poco no me pidió un 100mil para el motel el tal Manuel Rojas un Fiscal de Narcóticos vinculado en casos de vyroreí con soda, ahí vemos cómo se maneja la justicia realmente.
Mientras tanto los gordos siguen pescando para ellos y recaudando para la corona con total impunidad.