CIUDAD DEL ESTE (locales, por redacción) Todo cae por su propio peso, es un refrán muy conocido que alude al hecho de que aunque al principio parece que alguien se está saliendo con la suya, en algún momento todo se ordena como debe ser, pude tomar tiempo pero finalmente sucede. En Ciudad Del Este existe un grave problema con los creyentes, los fanáticos de Miguel Prieto que son incapaces de ver lo obvio y defienden a capa y espada al salvador esteño mientras por otro lado este acumula deudas, imputaciones, denuncias y presumimos tiene más de un secretario personal trabajando exclusivamente para borrar los comentarios negativos, los reclamos y las indicaciones que hacen los ciudadanos que no están fanatizados y realmente quieren el progreso y el bienestar para nuestra ciudad.
En medio de un escándalo por falta de pago a los funcionarios municipales, un préstamos millonario aprobado por el concejo municipal, manipulado por la mayoría que son también creyentes, las grandiosas supuestas inversiones donde no se ven resultados pero si se ve lo costoso que nos va a salir, una planta asfáltica que hasta ahora no se usa como se prometió, mientras los bacheos y remiendos son llevados con el raudal buses eléctricos llenos de inconvenientes incluyendo la falta de estación de recarga que se abonó en su totalidad también su construcción, ahora se suma un proceso jurídico fallido y que el sr intendente dentro de su inmensa arrogancia pretende seguir peleando a pesar de haber perdido ya y evidentemente las costas de este proceso saldrá del bolsillo de la municipalidad, es decir del bolsillo del contribuyente.
Ayer en todos los medios se transmitía el desalojo de los creyentes, quedaron fuera del shopping box, fuera del estacionamiento del shopping del este y Miguel Prieto no tiene mejor idea que seguir peleando por estos terrenos diciendo que pertenecen a la ciudadanía, lo mismo había hecho con la Terminal De Ómnibus, y al referirse al pueblo jurando utilizar el dinero que entra en la terminal destinando al Hospital Regional, cosa que hasta ahora no se ve, lo que si se vio fue al intendente llamando a los doctores de hijos de puta y acusándolos de estar escondiendo las unidades de terapia infantil. Un total desajuste, lamentable la decadencia de Miguel Prieto y su gestión, prometía ser un héroe y solo es uno más.