CIUDAD DEL ESTE (Reflexión, por Carlos Roa) Cuantos han sido juzgados, sobre todo las mujeres, por terminar una relación y querer salir de fiesta, con amigas, conocer nuevos lugares y nuevos chicos con los que sonreír, la hipocresía de la sociedad que no se pone en tus zapatos pero están siempre listos para señalar.
Cuando terminas una relación de bastante tiempo, la sociedad espera que guardes una especie de luto.
Que esperes y que ni se te ocurra salir con alguien más.
Lo que la sociedad no entiende;
Cuánto tiempo pasaste siendo infeliz,
Cuánto aguantaste y soportaste,
Cuántas lágrimas derramaste,
Cuánto de ti dejaste ahí, guardando la esperanza de que que todo cambiaría un día. Ellos no entienden, cuán duro fue darte contra el suelo, sentirte devastado, al ver que ese cambio esperado no ocurrirá.
Así que, si tu corazón se siente bien, y llega alguien a darte todo lo que esperabas déjate ir como gorda en tobogán, sonríe y vuelve a soñar.
No tienes nada de que avergonzarte.
Si no funciona, al menos te diste una oportunidad y si funciona jamás terminarás de agradecerle a la vida.
No le debes luto, ni tiempo a nada ni a nadie, suficiente con el tiempo que dejaste en esa relación.
Recuerda, Luto a los muertos.
