CIUDAD DEL ESTE (Realidad Fatídica, por Carlos Roa) Cuando yo era jovencito allá por el año 1965 éramos locos por ver las películas de Bruce Lee, Jackie Chan, o Palon Cassidi, los clásicos de Tucson Arizona y asi por delante teníamos que avocarnos a los cines como el Victoria, el Cine Granado, El Cine Roma y otros que quedaban por los alrededores de Asunción como el Cine Cerro Cora y hoy la Tecnología nos da el placer por un lado de no ser necesario ir a los cines sino que desde casa, sentados en el sofá, acostados en el somier, pero toda la comodidad y si por ahí querés comer un pororó apretas pausa se congela la imagen y te vas a preparar tu pororó vovés a accionar el control y volvés a ver la película que hoy día está en la pantalla Surviver, Stranger y asi por delante pero hay otro problema.
Como siempre dice el adagio ndofaltaivoi jagua kararahape y por qué decimos esto, porque el servicio de Netflix en Paraguay no se sabe quién es el responsable directo de ofrecer este servicio, uno paga en dólar, no te dan factura ni recibos cuando muchas veces se congestiona la señal Netflix no funciona y uno no sabe dónde reclamar y ahí sale un número telefónico de los EEUU buscando y buscando llegamos allí y para hablar con esas personas es 20mil guaraníes por minutos y yo creo que si es un “Socorro “ entonces se puede pero hay que hablar 40 minutos y la factitetra no tiene esos valores entonces cómo hacemos, es ahí donde nos ponemos fastidiosos con la División de Delitos Económicos y financieros de nuestro país que son ellos los que tienen que ver si estos servicios están bien, si pasan y pagan lo que tienen que pagar los impuestos por ofrecer en otros países y no solamente sacar dinero sin tener nada que ver y ahí nos acordamos que el director de esta institución es el Comisario principal Walter Cardozo un excelente policía entre los pocos que hay en las filas policiacas pero ahora nos sentimos afligidos porque nadie hace nada estos hacen lo que quieren como quieren y los ciudadanos paraguayos o los que habitamos este país somos perritos falderos de estas empresas a través de satélites sin ninguna instituciones que debería velar por esta institución.
