Las Anacondas del Este en plena disputa
La pelea entre el líder del clan Z y el concejal Alberto Rodríguez (por supuestos problemas económicos) fue confirmada por fuentes del mismo círculo de poder. Algunos ya hablan de una fuerte disputa de liderazgo entre el gobernador, la intendenta y el jefe del clan, que podría terminar quitándole la candidatura para la intendencia en el 2.015 a Sandra Zacarías. Se habla de potenciar la figura de Rocío Abed, esposa del gobernador y actual secretaria de acción social del gobierno regional, para postularla a la intendencia. El nido de Anaconda del Este en plena revolución, es todo lo que faltaba.
Según fuentes cercanas al clan, ya hubo turbulencias políticas en la pareja “Z” en un pasado reciente, por disputa de poderes. Sabido es que quien gobierna el municipio es Javier Zacarías, pero la que firma es su esposa, la intendenta Sandra McLeod. Ella se habría negado a aceptar ciertas imposiciones incendiando la llama de la discordia que luego fue aplacada parcialmente, porque según algunos comentarios de pasillos, estas fueron las palabras que habría balbuceado la lora, estoy cansada de ser la perrita Tchumbale aquí Tchumbale allí, quiero mi propio gobierno. Ja ja, se rebelaron las mujeres en el poder.
Al saltar al tapete estos problemas, la intendenta había salido a desmentir los rumores y criticar a la “prensa sensacionalista” por haber publicado el tema. Hoy la crisis parece haber retomado su camino, y los matices son diferentes; ya hay más allegados disgustados, la grieta crece y el equipo está a punto de dividirse en dos. Un agravante es el trato denigrante de Javier Zacarías para con sus dirigentes, muchos de ellos cansados, y otros ya en busca de nuevos rumbos y encontrar lugares donde si le tengan en cuenta, empiezan a abrir sus alas queriendo volar. La escasa expectativa por una normalización de la economía en el municipio y las tentaciones por probar nuevos aires, puede terminar significando un éxodo masivo de dirigentes de base -hasta hoy leales a Javier- hacia la nueva- o en gestación- corriente interna del movimiento que terminaría dividiendo definitivamente el grupo y peligrando la candidatura de Sandra para el 2.015.
El nombre que suena y cada vez con más fuerza es el de Rocío Abed, esposa del gobernador Lucho Zacarías que a su vez es hermano del líder del equipo, y cuyo tablero están a punto de patear. Es como la vieja historia, Abel y Caín, en grandes disputas para exhibir en la marquesina política una cara menos desgastada versus la actual demacrada con arrugas, disfrazadas por algunas plásticas de la intendenta Sandra McLeod. Caro lector, si esto a ud. no le despierta, que realmente es dinero que ellos pretenden, el poder para obtener dinero y dinero para seguir sosteniendo el poder. El pueblo les importa un caran…cholis, con tal de que ellos puedan bañarse con aceite de almendras y usar supositorios de Itú, Brasil.
La propuesta ya le habrían hecho escuchar al gobernador y a su esposa, y no se tomó de mala manera, aunque con cierto recelo por parte del ejecutivo departamental. Zacarías no estuvo en el casamiento del concejal Alberto Rodríguez su amigo personal de infancia, en un hecho que activó la usina de rumores en el equipo dando luz verde al desconcierto. Ese fue el estopín que incendió Roma, pero esta vez no fue Nerón sino el conocidísimo Alberto Rasputin Rodríguez, el recolector de dádivas de los comerciantes amigos para las arcas del Banco Z.
El gobernador Lucho Zacarías sí participó de la ceremonia, y compartió muy de cerca con el anfitrión, y para muchos su más próximo fuerte aliado hacia el liderazgo del bloque. De hecho las versiones de la pelea entre Javier y Alberto ya corrían desde hace tiempo, y no fue desmentido ni confirmado por ninguno de ellos. El trasfondo sería económico. El tema está instalado y no va ser raro que en breve lo desmientan públicamente, para seguir peleándose en algún cuarto oscuro.
