NACIONALES (enviado especial) El ingeniero Ernesto Sotelo, director de Comercialización del Ministerio de Agricultura, explicó que hay suficiente superficie de cultivos como para cubrir toda la demanda a nivel local, pero el factor climático está jugando una mala pasada.
Las constantes lluvias no están ayudando a la maduración, ya que se necesita tiempo soleado para ello, por tanto, se retrasan los plazos.
Sotelo reconoció que fuera de este inconveniente existe un desfasaje entre los precios que se venden en finca y los que se manejan en los supermercados. Por eso, el miércoles harán una feria en tres puntos para que la gente pueda comprobar que los productos que vienen de los productores son buenos y a precios accesibles.
Así también, señaló que esperan que se pueda normalizar el factor climático pronto, pues si se llega a liberar la importación, al final los mismos productores pueden ser perjudicados.
Mientras tanto el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) aclaró que no hay baja producción de tomate y que el motivo de la disparada de precio se debe a una presión que existe en contra de los controles que se realizan para evitar el ingreso de contrabando. Carlos Giménez, titular del MAG, sostuvo que el precio del tomate de los productores nacionales ronda los G. 8.000 el kilo y explicó que el encarecimiento del producto para el consumidor final podría responder a algún tipo de “apriete” al Gobierno para liberar la importación. “Tenemos una situación de altos precios en las góndolas de los supermercados, entre G. 15 y 17 mil el kilo; sin embargo, el productor oferta en finca a solo 7.000 y 8.000. Hay un desfasaje del 100 % del costo que se está recargando en los puntos de venta”, señaló en el canal GEN y fue publicado por Hoy.com.
Indicó que esta situación ocurre porque el Gobierno está poniendo mano dura al contrabando y altera el libre comercio de estos productos ilegales, de modo a que se priorice la producción nacional. Dejó en claro que existe mucha producción local, desmintiendo así la versión que habla de la suba del precio por una supuesta escasez. Sobre los responsables del desfasaje, dijo que son los intermediarios y los supermercados. “Es exagerado el precio y no se puede permitir esto”, acotó. A eso se suma, expuso el ministro, que los importadores están presionando para la liberación de la importación de estos productos frutihortícolas. La autoridad dijo que sospecha del contrabando que quiere traer aparte de tomates “sidra y pan dulce de contrabando”.
