Adolescentes exhibicionistas en
un mundo de lobos hambrientos
CIUDAD DEL ESTE (tendencias, por Carlos Roa) Es realmente vergonzoso la manera en que algunas chiquilinas salen a las calles, con la tendencia de los hot pants shortcitos calientes donde muestran lo que se debería exhibir después de completar los 18 años o tal vez después del casamiento. Pero éstas féminas mirin (jovencitas) se muestran de esta manera, como en la foto, donde vemos una chiquilina exhibiendo su short de vaquero y tratando de llamar la atención con el diminuto atuendo, dejando al aire sus glúteos para que los perros callejeros y hambrientos les queden las babas del placer, por la tentación que va deambulando por las calles de la ciudad.
¿Es una nueva generación o simplemente padecen de megalomanía? (Trastorno mental que padece la persona que se cree socialmente muy importante, poseedora de enormes riquezas y capaz de hacer grandes cosas) haciendo un recuento del feminicidio no será consecuencia de estas tendencias que utilizan las mujeres en muchos casos, ya con concubinos, o casadas o con parejas, y salen como queriendo exhibirse y dan un efecto colateral en aquel hombre que cree ser el titular de la cuestión y que esa dádiva tendría que ser solamente para él y no para el pueblo, el barrio o el país. De todas estas cuestiones siempre hay un efecto colateral y en muchos casos los padres también son culpables porque dejan que sus hijas adolescentes salgan a pasearse con shorts cortitos con sus amigas. Nunca pararon para pensar que por el camino podría haber un depravado y al ver este manjar no se le antoje tener hambre sexual y buscar herramientas como fuere para tratar de apaciguar el calor de sus deseos.
Señores padres, sean más conscientes y responsables si tienen hijas prepúberes o adolescentes, porque éstas todavía no tienen conciencia de lo que hacen y pueden terminar en una gestación de embarazo cuando ni siquiera sabe todavía ni como lavarse la imaginación.