CIUDAD DEL ESTE (realidad fatídica, por Carlos Roa) ¿Que pasa con la humanidad? Recuerdo yo cuando era un pinche pendejo de 14 años miraba a las compañeritas de colegio de una forma subliminal y escuchaba los cuentos de las fiestas de 15 años, que uno tenía que llegar en la casa de alguna chica que le gustase y que tenía que hablar con los padres para recibir su permiso oficial del cortejo a su hija. Para luego marcar si se de lugar, después de cinco, seis años de noviazgo, el famoso matrimonio. Y muchos quedaron de los hombres de esos tiempos pasaron por la abstinencia de cinco años, para después en una noche de luna de miel, poder romper el hielo o la imaginación del placer carnal del sexo.
Hoy en día todo cambió. Por lógica de la vida. Antes en un barrio las mujeres salían acompañadas de sus padres, sus primos, abuela, etc. Hoy con 14 años ya le dan una gran sorpresa al padre, con este murmullo; papá, vas a ser abuelo. También en los barrios había 2 chicas hermosas y el resto como para mirarlo de lejos nomás. Hoy es totalmente al contrario, en cada barrio, 98% son hermosas las mujeres. Y el 2% algunas con exceso de peso o con el arco libre sin ir a consultar al odontólogo. Y mujeres hay por todos lados, inclusive en muchos lugares las chicas toman la iniciativa, llamando al novio dónde estás y este responde me acabo de llegar. Y ella responde “esperáme que me voy a tu casa para dormir contigo. Chau”. Y ahora vemos cosas indecentes, como lo que ocurrió en San Lorenzo, en el cuartel general de la Patrulla Caminera, donde un personaje, inspector superior Reinaldo Giménez Sosa, subjefe de la Patrulla Caminera, tuvo el atrevimiento de pedir favor sexual a cambio de trabajo. Será que su sueldo no da para comprar una cajita de bombones o comprar un ramo de flores y enviarle a esa dama y tratar de conquistarla a pesar de su edad, tal vez esa cadete de 20 años tenía un castillo sexual de hacer el amor con un hombre experimentado, quien sabe. Pero posiblemente este señor es padre y no le gustaría que cualquier arriero le diga a su hija “emboguejy nde kasó ro piká hagua cincuenta mil´i´re”. Y también no le va gustar a su señora si habrá leído. Y ahora quién le salvará a este personaje? Chapulin Colorado ya murió. Solamente si le pide a una salvadora de la justicia, puede ser que tenga suerte de seguir en su puesto de trabajo y ella es conocida como la reina de la impunidad, Sandra Quiñone$.
