MIENTRAS TANTO EL PUEBLO PADECE DE TODO TIPO DE DERECHOS
CIUDAD DEL ESTE. Amigos, “socios” y hasta financistas. Varios de los nombres ligados a la empresa que sería cabecera de un gigantesco esquema de lavado de dinero que opera desde Ciudad del Este tienen vínculos con el cartismo y algunos hasta con financiamiento terrorista, incluso dueños de algunos shoppings, que ya fueron denunciados pero fiscales y jueces hicieron la vista gorda y condenaron a quienes denunciaron.
La caradurez de estos personajes a quienes medios dan protagonismo, al conocido libanés Walid Amine Sweid, expropietario del diario ADN, y que trabaja en connivencia con Héctor Guerin y Juan Carlos Salinas, en negociados amañados y sospechosos, según la fuente. Después están Hugo Velázquez politiquero, Juan Carlos Duarte ex fiscal de CDE, Ricardo Galeano importador contrabandista, Wildo Almirón el letradito del grupo, Abel Omar Guerin general retirado y el puntín referente, vividor extorsionador sin – vergüenza, caradura y mariposón Zacarías Irún, como dijo Calé. Dia, ciudadano paraguayo-libanés, es miembro de una familia altamente influyente en la zona de la Triple Frontera. El embajador es propietario, junto a su hermano Hussein y a otro miembro de su familia, Mahmoud, de las firmas Colisee S.R.L. y Dia Imports Exports S.R.L. Mahmoud figuraba en la lista de casi 300 personas investigadas en el caso de megaevasión detectado meses atrás en Ciudad del Este. Tanto Hassan Khalil Dia, el embajador paraguayo en Líbano, como Walid Amine Sweid son mencionados en un informe que fue presentado en junio pasado ante el Congreso de los Estados Unidos. De acuerdo a ese documento, al que tuvo acceso ABC Color, Sweid sería un supuesto financista del Hezbolá, un grupo considerado como terrorista por el gobierno del país norteamericano.
A esta rosca mafiosa de nuestro país estaría vinculado el propio presidente HC, su escudero principal, contador y mano derecha José Ortiz Escauriza, que es el que manipula el lavado más grande del Paraguay, según aseveró una fuente cercana a la embajada norteamericana.
Por eso vimos días pasados la supuesta desesperación del presidente de querer ndaje ser él el que va mandar limpiar aipó las sociedades anónimas, si él es posiblemente el cacique de esta S.A. en Paraguay. Claro, como dice el proverbio entre los grandes se entienden, se pelean y negocian. Mientras los chicos padecen, mueren de hambre, sin educación, sin remedios, y poco les importa. Pero la culpa es del pueblo, que votamos en ésta cúpula que viene hace años viviendo en las comarcas de la corrupción e impunidad, como el palacio de gobierno, el palacio de justicia, la fiscalía, gobernaciones, municipalidades, el congreso nacional y los ministerios, las casas partidarias, en fin, hasta algunos countrys como el que está en Hernandarias, conocido como Paraná Country Club, donde según investigaciones de este medio y la Red Globo descubrieron un día de estos un médico brazuca que no es medi ni co y hay muchos empresaa – ríos tanga con disfraces parecidos a los clubes de sodomitas, que cada uno pone el antifaz para que el otro no reconozca porque tal vez son competencia en el ramo de lavado y muchas otras cosas. Tendríamos que crear un nuevo partido político, donde todo sea nuevo, y los que se postulen se les mire los documentos y antecedentes.