INTERACIONALES (Realidad Fatídica) El hijo de Sheila O’Leary, Ezra O’Leary, tenía el tamaño de un bebé de 7 meses cuando murió en septiembre de 2019. Ella y su esposo tenían otros dos hijos que también estaban desnutridos.  La madre vegana condenada por asesinato en la muerte por desnutrición de su hijo pequeño fue sentenciada el lunes a cadena perpetua.

Sheila O’Leary, de 38 años, cuya familia seguía una estricta dieta vegana, fue condenada en junio por seis cargos -homicidio en primer grado, maltrato infantil con agravantes, homicidio involuntario con agravantes, maltrato infantil y dos cargos de negligencia infantil- en la muerte de Ezra O’Leary. Su sentencia en el condado de Lee, Florida, había sido aplazada en cuatro ocasiones.

Su marido, Ryan Patrick O’Leary, sigue en la cárcel a la espera de juicio por los mismos cargos. Los investigadores dicen que la pareja les dijo que la familia sólo comía frutas y verduras crudas, aunque el niño también era alimentado con leche materna. El niño de 18 meses pesaba 17 libras (8 kilogramos) y tenía el tamaño de un bebé de 7 meses cuando murió en septiembre de 2019, sgún un informe policial.

La pareja de Cape Coral tenía otros dos hijos, de 3 y 5 años, que también estaban desnutridos, según los investigadores. Un cuarto niño había sido devuelto a su padre biológico durante un caso anterior de desnutrición en Virginia, según los registros judiciales.

Los peligros de ser vegano

La ciencia ha confirmado que eliminar los alimentos de origen animal de la dieta humana aporta varios beneficios a la salud. La dieta vegana reduce el riesgo de diabetes, la probabilidad de sufrir infartos y de padecer algunos tipos de cáncer. Es una tarjeta de presentación magnífica para convencer al resto más allá de las connotaciones éticas de no comer animales, pero hay aspectos que deben vigilar mucho más que sus compañeros de planeta.

«La vitamina B12 es lo único que nos preocupa. Hay peligro en la gente joven que se hace vegana sin B12 que podría inclinar la balanza hacia la neuropatía grave», avisa el profesor emérito de Nutrición y Dietética Tom Sanders a The Guardian. Según sus investigaciones, un 20 % de los veganos tienen «serias deficiencias» de B12 y el mayor peligro está entre los niños. La mayor parte de la población adquiere esta vitamina a través de la leche y los veganos han renunciado a este alimento. También han descartado otras fuentes como los huevos, el pescado y la carne de vaca.

La esperanza del especialista de King’s College en Londres está en las nuevas leches vegetales. «Los niveles de B12 deberían ser más altos de lo que lo son en este momento. Si fueran tres veces más altos, no habría ningún problema», alerta a los veganos.

Veganos aconsejando a veganos

La fortuna de Sanders es que cuenta con un compañero vegano en sus investigaciones, el doctor Tim Key, subdirector de la Unidad de Epidemiología del Cáncer en la Universidad de Oxford. Key eligió no comer productos animales pero también eligió consumir habitualmente tabletas de vitamina B12 para evitar una neuropatía severa, que es irreversible. La B12 es esencial para el funcionamiento adecuado del cerebro y del sistema nervioso. También resulta capital para la formación de la sangre y de varias proteínas.

«Ser vegano es una oportunidad para aprender más sobre nutrición, incluyendo cómo equilibrar los grupos de comida, las funciones de los alimentos enriquecidos y los sumplementos. Por ejemplo, los veganos obtienen la vitamina B12 de esos alimentos enriquecidos y de los suplementos. Hay una guía disponible en nuestra web», secunda en la BBC Heather Russell, dietista de la oficial Sociedad Vegana en Reino Unido.

Más problemas de huesos

Key, el profesor vegano, ahora quiere investigar los efectos de la dieta sin animales a largo plazo. Según el especialista, es importante observar lo que ocurre cuando llega la vejez. Quienes apuestan por la dieta vegetal tienen niveles de colesterol más bajos, menos riesgo de diabetes, hipertensión o cáncer pero su delgadez podría ser un problema inesperado en una época de la vida en que cierto sobrepeso es mejor para la salud. Y los veganos sufren un 30 % más de fracturas óseas que el resto de la población. «Eso puede tener algo que ver con el calcio o incluso la vitamina B12», apunta Key sobre los efectos de su dieta en los huesos.

El último aspecto que deben vigilar son los sustitutivos. Los quesos veganos pueden ser altos en grasas, sal y calorías pero aportan pocas proteínas. Las frutas y los vegetales son excelentes para la salud, pero quienes no comen productos de origen animal cuentan con diferentes tipos de dulces, cervezas y algunas salsas con altos índices de sal.

El profesor Key afirma que mantendrá su dieta vegana pero que no alimentará mitos. Quienes escriben artículos en internet en los que afirman que la vitamina B12 no es necesaria para el ser humano no tienen evidencias científicas. Como tampoco las hay de que los veganos vivan más que los ‘cárnicos’. La parte optimista es que los productos de origen vegetal pueden mejorar. «Si los sustitutos de la carne se diseñan con sensatez y no tienen altos niveles de esas cosas (grasas, sal y calorías), deberías esperar que sean buenos para la salud», completa el experto vegano.