Las artimañas de una empresa tabacalera para joderle la vida a algunos productores

SE FUERON PERSONAJES, PERO QUEDÓ EL ESQUEMA

CHORE (enviado especial) Más un caso de la Agrotabacalera del Paraguay, perteneciente al ejecutivo de nuestro país, Horacio Manuel Cartes Jara. En San Rafael Kokuera, de éste distrito viven en zozobra desde hace mucho tiempo y con la letanía de Jesús en la boca por lo que ocurre a diario que es difícil de probar el tiempo real, porque estos son como los ninjas que aparecen solo para dar el golpe y luego se van, dejando la hinchazón, dijo un kokuecero del tabaco, que le es difícil seguir en esto porque tienen que pagar por esto y lo otro y aquello. Hay que pagar abono, fertilizantes, a veces vencidos, y cuando tengo que quejarme, no puedo quejarme, porque dicen cuidado lo que vas a decir, en una palabra más, al productor se le cobra hasta por respirar, cuando se tiene que hacer la selección de sus productos, no se le permite entrar a inspeccionar o observar cómo se hace la clasificación, ya vienen con el resultado nomás. Y estos siempre son la clasificación al productor siempre está mal, donde le decomisan algunos miles de kilos, con el epíteto que hay una parte que se pudrió el tabaco y es de pésima calidad.

Un caso, de un productor que entregó mil kilos y no le reconocieron hasta ahora y lo maltrataron, no puedo decir el nombre porque es complicado y tiene repercusiones que hasta se puede llamarlo de fatalidad. Vivimos como rehenes en este trabajo, donde utilizan los mecanismos más burdos para decirnos que somos nosotros que tenemos que agradecerles por poder trabajar con ellos, remedios para el tabaco, fertilizantes, y hasta estufas que saldrían unos 15 millones, ellos fracturan unos 40 millones, y son estufas precarias, que sirven para secar el tabaco. No tiene aire acondicionado, no tiene nada que no sea el común, pero ellos dicen que es de gran valor y sale cada uno unos 40 millones. El que usó este mecanismo ya no está, el conocido Federico Montanía, que vino por estos parajes como se suele decir, en un escarabajo, y se fue en helicóptero. Siempre solemos ver en las noticias otra triste realidad aipó remba´aposeramo ekolabora´ara. Pero no es colaboración con un chanchito, una cabra, una bolsa de mandioca, nada de eso, y si hacer ofrendas carnales a los jefes de mandos medios, para que nuestras hijas, sobrinas o parientes, puedan trabajar en la agrotabacalera.

Eso fue antes y según las malas lenguas hasta hoy continúa. Somos esclavos del trabajo de la agro en casi todos los sentidos y tenemos miedo de Cartes porque hoy es bien conocido su historia y su andamiaje por la vida de este país. A parte de eso no te firma ningún tipo de contrato, dijo Rubén. Sobre todo alegó que no hay mucha seguridad para los que trabajan en la clasificación, donde tendrían que usar guantes, máscaras, cambiar esporádicamente, pero la única cosa que sobresalta son las deudas que ellos hacen crear de una manera u otra, manejada por algunas funcionarias de administración que ya están adiestradas a hacer garabatos donde en vez de aparecer a favor del productor, siempre aparece en contra. Recuerdo cuando el funcionario Líder Giménez me traía 100 plantitas, una sola vez, pero cada vez que llevaba mi producto era descontado mil plantitas, varias veces. Nunca se hizo una auditoría de contralores independientes a la tabacalera que puedan ver cuántas propiedades dejó a nombre de él y otros del grupo de la agro Federico Montanía.

Inclusive Pedro Benítez, un volái que fue guardaespaldas de Federico, dicen que también tiene bienes por ahí. Y quién no, si hacen lo que quieren. Pero bueno, este es el país en donde se cree en todo lo que se ve o se escucha en propagandas engañosas. Hay un dicho que dice “ no hay mal que dure 100 años”. Pero por favor te pido mi Dios que nos dejes completar, o no llego a ver el cambio. Y mucho más todavía si en estas elecciones tengamos que darle más miel a estos sanguijuelas sin vergüenzas que se postulan con el lema voten por mí que yo seguiré el progreso del nuevo rumbo.

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