Barbarie de la política paraguaya
CIUDAD DEL ESTE (Carlos Roa) Los bárbaros politiqueros de nuestro país que hacen una barbarie (Actitud de la persona o grupo que actúan fuera de las normas de cultura, en especial de carácter ético, y son salvajes, crueles o faltos de compasión hacia la vida o la dignidad de los demás) en el Paraguay, donde somos en tiempos electorales como actualmente se está preparando para tratar de enmendar la fayuta enmienda del famoso rekutú y como no pudieron, estos bárbaros de la politiquería paraguaya, encabezada por el propio presidente de la República Manuel Jara y sus 27 acólitos vuelven al ataque con propagandas en medios, disertaciones, declaraciones de los mismos de siempre, como el Llano de la sin – verguenzía, el López Moreira de los vendepatrias, Aguinagalde un senador de rótulo pero de gestión un imprestable, el puntín del Este, otro gran sin – vergüenza que sólo se dedica a jactarse de sus caprichos floriponados con sus stripper boys escogidos a dedo y sus apuestas en casinos del hemisferio sudamericano y que nada le importa sus semejantes paraguayos, senador Juan Darío Monges uno de los más corruptos entre ellos y para no olvidar de la famosa vendedora de tortillas Ña Chuky Samaniego, que según fuentes se pasaba vendiendo remedios de los asegurados del IPS. Y estos son los que quieren volver ndaje.
Con estas fórmulas el Paraguay está condenado a cadena perpetua por darle rienda suelta o no ponerle freno a estos que hace tiempo roban y seguirán saqueando el país con supuestas promesas incumplidas, ya que en Paraguay reina la impunidad, que es el cáncer, el diabetes, el artrosis, el infarto y quién diría, hasta el pungá del paraguayo, porque siempre el mismo remedio. La metamorfosis de los politiqueros en nuestro país realmente es vergonzosa, pero lo más tétrico y triste es el protagonismo que le dan los medios a estos parlamentarios, intendentes, y otros que ocupan cargos dándole voz de off o publicándoles las barrabasadas dichas y hechas por estos bárbaros politiqueros paraguayos.
Funciona mal, pero muy mal la justicia paraguaya, si es que hay, que sólo sirve para delincuentes y no para las víctimas de los delincuentes. Total, vaciar las arcas del Estado es como ir de parranda en la pista de baile de Mar del Plata, allá por los años sesenta, en la calle Japón y Félix Bogado. Total, una ciudad como CDE que se pueda dejar en manos de policías corruptos y envueltos en forma suspicaz con los delincuentes del famoso PCC o Comando Vermelho, como lo llaman en el “hermano” país, donde no tenían bala, no tenían arma larga, pero París, el jefe de la GEO no sabía donde estaba. ¿Y dónde están los bárbaros politiqueros de nuestro país que tenían que sacar por decreto recursos para la Policía en armamentos para poder proteger a los ciudadanos? Digo policías a aquellos que lo hacen por convicción y no aquellos que están por convicción. Sumado a esto existen muchos factores que hace que nuestro país terruño de grandes protagonistas que hoy día en paz descansen y solo sirven a los carroñeros colorados, liberales, encuentristas, avanzan paisistas, comunistas, febreristas y otros istas que aparecerán o están en estudio de algún medio comprado.
En fin, esto no es ni la mitad de lo que se puede decir y lo que se escucha en algunos medios, donde el entrevistado es uno de los más cuestionados, y a sabiendas de su particularidad de corrupto lo dejan hablar 20, media hora y el ciudadano que llama para quejarse, Roberto le dice “bueno, vamos ver qué hacemos, chau”. A la pucha, 730!!!