Los tratamientos para eliminar piedras en los riñones generalmente incluyen el consumo de medicamentos y píldoras. Son fáciles de obtener y seguros, por lo cual es este tipo de tratamiento el más común. Sin embargo, muchas personas prefieren buscar tratamientos alternativos o complementarios con los que puedan evitar o complementar el tratamiento para así terminar o disminuir con la cantidad de píldoras.
Si eres uno de ellos, me alegra informarte que estás en el lugar indicado, ya que vamos a brindarte algunos consejos y 3 alternativas naturales para eliminar piedras en los riñones, o bien para complementar el tratamiento en forma natural y hacerlo más llevadero, ya que si sufres de la formación de piedras en los riñones, sabes cuan incómoda, dolorosa y desagradable es la situación.
Piedras en los riñones y cálculos renales
Por ello te brindamos a continuación algunos consejos que deberías considerar tanto como complemento al tratamiento y alternativa así como a modo de prevención.
Beber mucha agua y líquidos
Aunque te sientas bien y no sufras por la presencia de piedras en los riñones (y claro, si sufres de estas) es muy importante mantenerse siempre hidratado. Sobre todo si ya las sufres, ya que la deshidratación es muy dañina para quienes padecen de esta situación. La deshidratación del cuerpo, provocará bajos niveles de orina, por lo cual la formación de sustancias y la concentración en sólidos de las mismas se verán favorecidas.
Cuando la orina se acumula con elementos y sustancias como el calcio, el oxalato y el ácido úrico y no se beben las cantidades de agua necesarias, se brinda todo lo necesario para la formación de sólidos, piedras y cristales en los riñones.
Beber mucha agua y líquidos en grandes cantidades y de forma constante provocará inevitablemente ganas de orinar. El hecho de orinar, por más que es doloroso si hay presencia de estas desagradables formaciones, incide directamente en la desintegración y en la expulsión de los mismos. Por ello, una forma natural tanto de ayudar a resolver esta situación como a prevenirla, es tomar mucha agua y otros líquidos o infusiones, como un buen té, que al mismo tiempo puede ser uno que tenga propiedades que estimulen o faciliten nuestras visitas al baño.
Además de agua y té, se pueden preparar jugos naturales por ejemplo con frutas como el limón, arándanos o agua de coco, que ayudarán a la desintegración de los cálculos, al igual que la ingesta de frutas con altos contenidos de potasio, sobre todo bananas.
Aumenta el consumo de frutas y vegetales
Como acabábamos de señalarte, existen algunas frutas que ayudan en la desintegración y prevención de piedras en los riñones, además, incrementarás tus defensas y reforzarás el sistema inmunológico, ayudando a prevenir otros tipos de enfermedades y condiciones desagradables que puedan agravar aún más la situación.
Con la ingesta de entre 5 y 7 frutas y verduras al día, ayudarás en la desintegración de los cálculos, en la prevención de los mismos y también en la prevención de la acumulación de calcio en las regiones en las que pueden formarse los mismos.
Consume grandes cantidades de vitamina C
La vitamina C y beber muchos líquidos serán tus principales aliados en esta dura batalla e incluso, puedes unir ambos, preparando jugos y bebidas que tengan altos contenidos de vitamina C. Algo a tener en cuenta, es que la vitamina C en nuestro cuerpo facilita la acumulación de oxalato, lo que puede confundirnos un poco, sin embargo esta también desintegra las unificaciones de calcio y desintegra las piedras en los riñones, por lo cuál, tienen propiedades que inciden más en la desintegración que en la formación de cálculos.
La vitamina C, que la podemos encontrar en altos contenidos en frutas cítricas como el limón, la naranja, los pomelos, las limas y las piñas entre otros y con las cuales podemos preparar todo tipo de jugos naturales, tiene propiedades diuréticas, por lo cuál además de favorecer en la desintegración de los cálculos, también nos provocará ganas de orinar, funcionando con mucha eficacia en el tratamiento.
Basta con añadir unas cuantas frutas y verduras a nuestra dieta diaria, así como una serie de hábitos saludables y naturales, no se trata de hacerse con una sobredosis de vitaminas, sino de complementar el tratamiento prescrito.