UN ESLABÓN MÁS EN EL DECADENTE SISTEMA DE SALUD

LA ENFERMERA TARTUFA Y CACHAFA, LIBRE Y CAMPANTE BURLANDOSE DEL PUEBLO

 

CIUDAD DEL ESTE (Realidad Fatídica, por Redacción) Vamos a seguir con el caso de la mujer que parió en el piso del Hospital de Itaugua, una situación que genera indignación en la población y que resulta una clara muestra del trato humillante y denigrante al que son sometidos a diario miles y miles de paraguayos que acuden a algún centro asistencial, muchos pueden decir que la enfermera Gabriela Yaffar no es la culpable de esta hecho, esta enfermera estaba encargada de recepcionar las urgencias, y simplemente hizo caso omiso de los pedidos de asistencia y ayuda que le solicitaban tanto la embarazada como su madre que la acompañaba, Gabriela Yaffar fue imputada por omisión de auxilio y el domingo quedó libre, retirándose de la jefatura feliz en una camioneta de la Policía Nacional y saludando como si fuera la miss Paraguay, demostrando una vez más que a nadie le importa la situación actual de nuestro sistema sanitario, y que quedarán, como siempre, impunes todos los que cometan negligencias y barbaridades dentro de los hospitales porque como si fueran una enorme secta el personal de blanco se cubren entre ellos sus falencias y se abrazan como hermanos bajo el manto de la política, si, de la política, porque ahora sale a la luz que la ausencia de médicos, porque NO HABÍA PROFESIONALES, se debe a que estaban todos en un meeting político.

La enfermera que fue imputada declaró que ella hizo “todo lo posible”, menos asistir el parto, según ella corrió a pedir ayuda, pero qué clase de enfermera es la que no puede proveer al menos de una silla, una cama, una almohada o por lo menos una sábana y ponerse a disposición de recibir al niño en sus manos, para que esta mujer no tenga que parir peor que un perro, en el piso, sin ningún tipo de ayuda, y aún después de que el niño salió de la matriz estuvo tirado en el piso sin que ningún personal de blanco pueda asistirle, la enfermera supuestamente estaba llamando por teléfono a los profesionales que no estaban ahí cumpliendo su horario de trabajo, un médico que se cruzaba por el pasillo y que no estaba de turno se encontró con la mujer, el charco de sangre y el bebé en el piso, y lo alzó esperando que la enfermera, que estaba desaparecida en ese momento, se haya ido a traer la caja de procedimiento para poder asistir a la mujer y su recién nacido, sin embargo, la enfermera nunca volvió y el mismo doctor que estaba rescatando al bebé del piso tuvo que dejarlos de nuevo al bebé y a la madre para ir a buscar la caja de procedimientos médicos y poder concluir el parto.

Lo más indignante de todo este asunto es que la situación no cuadra en ningún tipo penal, están por levantar la imputación de omisión de auxilio, porque la enfermera si “prestó auxilio” buscando a quién pueda atender a la parturienta, sin embargo la abuela de la víctima refiere que nunca se movió de su lugar ni siquiera fue capaz de acercarle una silla de ruedas a lo que no quedó de otra que acostarse en el piso y parir ahí mismo, tampoco cuadra en el artículo 6, inciso j de la ley 5777, que habla de violencia obstétrica, porque dicho artículo refiere de la violencia de la persona que está asistiendo el parto, sin embargo aquí nadie asistió el parto.

Este es el mayor inconveniente de nuestro sistema judicial, que tanto los fiscales inútiles, como los jueces y abogados inútiles se ciñen a las palabras exactas que dicen en los artículos, sin embargo existe un principio por el cual se crea esa ley, y aunque este no esté escrito explícitamente en el artículo, al verse ese principio atentado debe cuadrar en el delito, acaso no estamos de acuerdo en que esta mujer y su hijo fueron violentados en sus derechos?? Y donde están los organismos de Derechos Humanos que tanto meten su cuchara cuando algún miembro de facciones criminales son presos?? Defiende a capa y espada a miles  de delincuentes, pero a una mujer y a su hijo inocente no salen a defender ni a pronunciarse de ninguna forma, quién tiene la culpa de este sistema tan precario donde una enfermera no pudo hallar un médico, una cama ni una silla para una parturienta, y luego de la explosión todos siguen libres y campantes. La directora del Hospital de Itaugua Yolanda González, pidió disculpas, pero a quien le sirve esas disculpas??? Si la institución no funciona ni tiene métodos para solucionar estas situaciones todos deben rajar, la violencia en la salud se ejerce cada día, cuando no hay camas, cuando esperan en el piso ser asistidos, cuando pierden sus bebes por falta de atención, cuando les cortan la pierna equivocada, le perforan el bracito a un bebé buscando una vena, y miles de otras situaciones. Y la respuesta de la justicia es que “no cabe en el tipo penal”, es una vergüenza Fiscal Yennifer Marchuk.

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