LA INOPERANCIA DE LA POLICÍA Y FISCALÍA SALEN A LA LUZ A NIVEL INTERNACIONAL POR LA DESAPARICIÓN DE UN JOVEN BRASILEÑO

CIUDAD DEL ESTE (Realidad Fatídica, Redacción)  Lamentable es la situación que se vive en el país, no solo por el altísimo índice de delincuencia en el que nos encontramos sumidos sino también por la falta de interés del estado y de los organismos policiales, fiscales y otros que son los encargados de investigar las hechos delictivos, de proporcionar apoyo a las familias y sobre todo de buscar la forma de hacer justicia. Pero no, y ahora resulta que por la triste desaparición de un estudiante de nacionalidad brasileña que se encontraba estudiando aquí, sale a la luz los cientos de desapariciones que hay en el país donde el ministerio público no es capaz de difundir un rostro para que la ciudadanía pueda aunque sea enterarse de lo que ocurre.

Meli Fleitas, su cuerpo fue encontrado por albañiles un año después de su “desaparición” y de que todas sus amigas y familiares hayan clamado hasta el hartazgo por la detención de su novio, hoy principal sospechoso, prófugo vivito y coleando en otro país.

Isaura Bogado, su cuerpo fue encontrado en un yuyal, donde vecinos denunciaron escuchar los gritos de una mujer. Mientras medios de televisión señalaban los tatuajes de Isaura que en ese momento estaba desaparecida la policía no hizo un solo movimiento para encontrarla, reaccionaron recién cuando fueron a recuperar el cuerpo en avanzado estado de descomposición y otra vez quisieron decir que fue un suicidio.

En los casos emblemáticos como el de Meli Fleitas o Isaura Bogado donde gracias a la acción de familiares y amigos se tuvieron miles de pistas e indicios y sobre todo se puso en alerta a la ciudadanía pero ni aun así la policía no era capaz de detener a los sospechosos, el ministerio público de pedir una orden de captura, no se hizo un simple rastrillaje, no hubo un solo detenido, nada!!! Se es peor hasta que los cuerpos aparezcan, y hasta el día de hoy no hay nada para los responsables, ni una satisfacción para los seres queridos, absolutamente nada, solo un gran OPAREI!

La madre de Augusto Streki cuenta como muchas madres con hijos desaparecidos se comunicaron con ella y anhelan un poco de interés de parte del estado paraguayo, inoperante e ineficiente.

Isabel Streski, madre del estudiante brasileño desaparecido, dijo que en nuestro país existen numerosos casos de universitarios que en algún momento estuvieron con paradero desconocido y que incluso de algunos nunca más se supo nada

28 madres me contactaron, con historias parecidas con sus hijos, todos estudiantes de medicina, pero no son de la misma facultad”, refirió

“Algunos de ellos están con tratamiento psiquiátrico”, añadió la señora, en comunicación con radio Monumental 1080 AM.

Mencionó que cuando empezó a difundir la foto de su hijo, mucha gente le dice “‘señora que Dios le bendiga, yo también estoy buscando a mi hijo’”, luego de señalar que hay chicos que no volvieron. “Algo está pasando”, insistió

Antonio Augusto Streski Manjinski, de 25 años, es alumno del último año de la carrera de medicina, en la Universidad María Auxiliadora (Umax), de Asunción, y estaba residiendo en la zona del barrio capitalino de Loma Pytã, ya cerca de Mariano Roque Alonso, departamento Central.

Estaba acostumbrado a enviar mensajes todos los días a su madre, quien reside en Estados Unidos, pero tuvo que venir a nuestro país, para acompañar de cerca la búsqueda y localización de su hijo

Le llamó mucho la atención, cuando aquel 4 de octubre, ella no recibió el saludo matinal del joven, por lo que se puso en contacto con algunos de sus compañeros, pero nadie supo qué paso del joven extranjero.

“Todo estaba en su casa, el dinero que le enviaba, teléfono, ropa todo estaba. El lunes 3 fue la última vez que hablé con él, me dijo que era un lindo día en Paraguay”, comentó la doña

Aseguró que a su hijo “le encantaba vivir en Paraguay; aprendió el guaraní, trabajaba en el hospital y eso le hacía feliz”.

La familia es de la localidad de Ponta Grossa, estado de Paraná, donde Antonio Augusto se había quedado, por la pandemia del coronavirus, para trabajar como enfermero en el hospital local, y regresó a nuestro país hace poco, para retomar las clases presenciales. Estudia medicina desde el 2016.

 

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