CIUDAD DEL ESTE (Sinvergüencía, pro Carlos Roa) Es realmente lamentable cómo se maneja la justicia en nuestro país, pero qué podemos esperar si los encargados de defender los intereses de los acusados son los primero prostitutos judiciales donde el acusado que no pueda pagar un abogado privado para resolver sus asuntos debe someterse a un defensor público que ni le interesa el caso ni tiene intenciones de hacer las cosas como corresponden, realmente estos solo están esperando el fin de mes para cobrar los 20 millones que el estado les paga por nada.

Es así como tenemos a la Abg. Mirtha Bastos, una conocida defensora pública de Ciudad Del Este que simplemente no comunica a su defendido cual es la situación en la que se encuentra su causa, como todos sabemos el abogado utiliza un poder que le da el representado para poder tomar las decisiones y acciones que el proceso judicial requiera, pero igualmente el Juez solicita que el defendido se presente en el tribunal, y que participe de las decisiones que se van tomando, como fue el caso en el que el juez notifico a la defensora Mirtha Bastos que se presente el defendido para poder acordar plazos y montos para pagar la multa a la que se le estaba sentenciando y esta simplemente nunca le dijo a su representado que tenía que acudir, y no acudir cuando  el juez te llama se transforma en una rebeldía, donde puede salir hasta orden de captura dependiendo de la situación, tal fue este caso donde tiempo después salió a la luz que la defensora estaba siendo $$educida por la otra parte y que esta sería la razón por la que no comunicó las notificaciones, arriesgando la libertad de su defendido y perjudicándolo de tal manera que una multa se convirtió en dos años de prisión.

Este es solo un ejemplo de cómo se maneja la defensoría pública, por abogados incompetentes que solo buscan enriquecerse con el menor esfuerzo se arriesga la libertad de las personas que tienen derecho a una defensa correcta, para eso están cobrando 20millones del estado! Y luego están los abogados privados que simplemente por mirarte ya piden mínimo dos millones y después desaparecen semanas y meses antes de tener alguna respuesta y cuando de repente uno se encuentra en el shopping o en el supermercado con el abogado de faena este te responde “tranquilo tranquiiilo, ya está por salir” una profesión que realmente merece el mismo castigo que se le dio a Juana de Arco,